Capitulo 45. Daemon mira a Clara, ¡Demonios! Él no tiene respuesta a esa pregunta, pues su mujer es hermosa, muy hermosa, con un cuerpo increíble. — Con gran dificultad. — responde sin más. — ¿Entonces que te detiene? Por Dios, ¿Acaso no lo ves? Es una mujer demasiado sensual, llama la atención de cualquiera…— Calma hombre. Daemon se levanta con enojo. —Lo digo en el buen sentido, por dios, cualquier hombre desearía consumirla. — No tienes que decirme lo que ya yo sé, y también ya sabes la razón por la cual aún me contengo. — Bien, entiendo, como tú quieras, tu palabra, tu palabra Daemon, jamás había estado tan en contra de tu palabra como hasta ahora, se que la deseas, veo como la miras Daemon. — Daemon golpea el escritorio muy serio. — Tú no puedes entender nada, no cuestione

