Un bebe en camino

CAPITULO 4 TEMPORADA 2

CAPITULO 4

Miro a todos lados buscando algún defecto, quería entender porque tantos salían con esa carita. Vamos caminando por lo pasillos cuando veo una habitación, que ni si quiera tenia cuatro paredes. -Aquí están Nathan y Aaron, podéis pasar a conocerlos – dice la chica cogiendo el paño de la puerta.

-¿Puedo quedarme a solas con ellos? Solo unos minutos – digo mirando a la mujer, veo como asiente con la cabeza.

Al entrar en la habitación, empiezo a quedarme alucinando. Son gemelos, para mi sorpresa y con el pelo rubio como yo. Me acerco a ellos, los dos se me quedan mirando y puedo alcanzar a ver que tienen los ojos marrones.

-Buenas, me llamo Sergio Alex.. quería preguntaros algo – digo acercándome a ellos y agachándome para estar a la altura de la mesa de juegos donde están jugando - ¿Sois felices aquí?- pregunto mirando a los dos.

Veo como uno de ellos, se acerca a mi. Me toca la cara con bastante miedo, y al segundo me da un abrazo. Para mi sorpresa. Paso los brazos por detrás de su espalda para abrazarlo, podía notar su miedo interior. -Lename- me susurra al oído. -llenamos – escucho que dice el otro gemelo.

-¿Seguros?- digo mientras se separa de mi, el gemelo que me estaba abrazando.

-TI – dicen los dos a la vez.

Me levanto, y voy hacia la puerta. -Entra Lucas – digo estirando la mano para que me de, al ver que se ha despertado. Entramos de nuevo en la habitación, ahora con Lucas.

-Lucas- digo agachándome a su altura, cuando veo que no deja de mirar a los otros niños – El papa quiere llevarse a estos nenes a casa, para que estén con nosotros ¿Te parece bien?-le digo mirando en todo momento su reacción.

Me da un beso en la mejilla, y se acerca a los gemelos. No sabia que iba hacer, doy media vuelta en cuclillas. Y veo como empieza a tocar por la parte de arriba de la nariz, los dos gemelos se quedan quietos. Sin entender que estaba pasando.

-Papi, quiero que vengan.. Son buenos – dice acercándose de nuevo a mi.

-Vamos Lucas, salgamos de aquí – digo cogiendo en brazos a Lucas.

-Papi pero quiero cuidarles – dice cuando empieza a llorar. No entendía porque se lo había tomado así.

Salgo de la habitación con Lucas llorando a grito pelado en mi brazo. – Cariño, ahora vendrán – digo intentado tranquilizarlo. Sabia que a lo mejor era la mayor locura de todas. Vivir con 3 hijos y a lo mejor 4, pero tenia que salvarlos de esta vida.

-He decidió, que voy a quédame con ellos – digo mirando a la mujer.

Veo como enseguida aparece, un hombre trajeado. De la nada. Como si hubiera estado escuchando la conversación. -Venga por aquí – dice el hombre trajeado, mientras veo de refilón como la mujer entra en la habitación donde están los niños.

-Hermano, me tengo que ir ¿Podrás solo? – dice mi hermano acercando el carro a mi - Quiero que sepas que lo estas haciendo es de valientes, hermano – dice acercándose a mí, para abrazarme.

Sabia desde aquel momento podía en él, para lo que hiciera falta. Sigo al hombre del traje, no sabia donde iba. Todo estaba peor de lo que había visto al principio, sabia que hacia lo correcto. Solo tenia que recoger un poco más este lugar.

-Entremos aquí – dice el hombre abriendo la puerta, de una habitación que parece en buen estado.

Entramos en los dos en la habitación, veo como se sienta en una silla delante del escritorio que hay. Me quedo de pie al no ver mas sillas. Me pone dos papeles delante de mi, me pongo enseguida a leerlos. Me doy cuenta de que es un papel donde me autoriza de la custodia de Nathan, y el otro era mismo, pero con los datos de Aaron. Firmo los dos papeles, y los empujo un poco para que los vea.

-Muy bien ahora ponga su dedo aquí para que mire que no tiene antecedentes.. - Pongo el dedo donde me a dicho, un poco nervioso e lo que pudiera salir - Muy bien todo limpio, ahora tienes que llevarlo al ayutamiento.. En unos días llamare para ver que esta todo en orden ¿Entiendes? - dice el hombre del traje con una sonrisa de haber echo el negocio de su vida.

-Si – digo cogiendo la carpeta donde ha dejado los documentos para mi.

Salimos de la habitación con Lucas super tranquilo en el carro. Llevo esos papeles en la mano, no quería que se me olvidase ir al ayutamiento. Me sentía extraño, todo esta pasando tan deprisa. De repente era padre de tres hijos y a lo mejor de otro. Voy caminando para la salida, cuando no dejo de pensar en todo lo que esta sucediendo. Cuando llego a la habitación donde están los gemelos, los veo la puerta sentados en carro gemelar. El carro lleva una bolsa bastante grande de color blanco con consturas azules celeste, colgaba de la barra de coger.

-Cuidalos bien -dice dándome dos pequeños peluches – Estos son los peluches que traían el dia que los trajeron.. Ellos duermen con ellos.

Me di cuenta en ese comentario, que ella no veía esto como un negocio sino una manera de ayudar a los niños que lo necesitan.

-Cada uno de ellos llevan una pulsera en la muñeca, lleva sus nombres – dice la chica señalándola- Si alguna vez se la quitas la manera de saber cual es cada uno.. Tienen una peca en la muñeca de la mano Nathan la tiene a la izquierda al contrario de la mano que más usa – dice la mujer mirándolos y enseñándonos por donde es en su muñeca – Y Aaron la tiene en la mano derecha al contrario de la mano que mas usa que es la zurda ¿Lo entiendes? Cuídalos mucho – dice la chica mientras asiento con la cabeza diciendo que si.

Desato el cinturón de Lucas, para que baje del asiento. -Lucas baja – digo mientras cojo mi mochila que esta debajo del carro, que lleva pañales y comida para Lucas.