Ariel. —Hola amor no me darás un besó, ya no me quieres es eso, ya te sientes tan hombre que ya no me necesitas—. Sonrió y la abrazo. —Como no darte un beso si eres una de las mujeres más importantes de mi vida, pasa—. —Si y cuántas mujeres tienes en tu vida—. Me mira acusatoria. —Pues tengo tres, tu, mamá y la más importante de todas Arely—. —Oye soy tu hermana debo ser más importante que todas—. —No yo no te elegí a ti ni a mamá pero si elegí Arely—. Le doy un beso. —¿Qué haces aquí no deberías estar no se.... en la playa—. —No, quise venir de chismosa a ver cómo te ayudo dime hay que secuestrar a mi verdadera cuñada o ¿no?—. —Siempre de exagerada—. —No lo soy, pero si quiero hablar contigo y Arely de algo muy importante—. Dice sentándose. —¿Qué es eso tan importante Pen?—. —E

