Dos meses después – Palermo Sus recuerdos eran borrosos, Alex trataba de abrir los ojos y recuperar el sentido, pero parecía que su cuerpo pesaba, era como le hubiesen amarrado costales de arena a los pies, como si la gravedad fuese más fuerte que antes, porque sentía que estaba completamente agotada. La noche anterior la magnifica mansión de Palermo había recibido a visitantes de todo el país, la magnitud de los tratos y buenos manejos del puerto le estaban dejando a los socios de la Famiglia rubros considerablemente grandes a comparación con años anteriores, por lo que su la Regina quiso que la grandeza de su prima fuese exaltada. Lo que no esperaban, era que justo esa noche cuando todos estaban en medio de los excesos y el placer, Niccolo nuevamente había aprovechado el ambiente para

