Kaelin
Después de esa extraña reunión, Alaric y yo nos dirigimos al área común. Estábamos decididos a obtener respuestas a más de nuestras preguntas. Rhea había optado por revisar las pertenencias de los Colmillos Negros para encontrar alguna pista sobre la cuenta perdida. Sabía que ser alfa sería difícil, pero nunca imaginé que tendría que lidiar con un misterio financiero. Y, por supuesto, todo se remontaba a Jaxon.
Era tan típico de Jaxon ser la maldición de mi existencia incluso cuando no estaba por ningún lado. Empezaba a preguntarme si alguna vez me libraría de su control sobre mi vida.
El área común tenía tiendas a ambos lados de un amplio camino peatonal. La gente vendía todo tipo de joyas, ropa, ungüentos, salsas, víveres, bebidas, comida callejera y juguetes. Era un lugar bu
