ENAMORAME

SEIS AÑOS DESPUÉS

- Cierren – ordeno dándome la vuelta para que los demás puedan hacer lo que les pedí, antes de salir del quirófano observo el reloj dándome cuenta de que estuve más de doce horas en cirugía. Mientras me lavo observo que los demás hagan las cosas bien hasta que un rato después se llevan el paciente y yo decido ir a darme una ducha antes de continuar con mi turno.

Camino hasta la sala de médicos donde me quito el uniforme quirúrgico antes de entrar a la ducha el lugar que más odio después de mi cama. Trato de mantener la mente en blanco, pero me es imposible. Odio mi vida, porque esta termino en un instante hace seis años luego de que mi esposa e hijo murieran por culpa de un imprudente. Después de mi recuperación fue tan grande e insoportable el dolor de la muerte de mi familia que en varias ocasiones estuve a punto de suicidarme, pero las palabras de Madison siempre vienen a mi mente y decido continuar con mi vida miserable. Desde aquel trágico día decidí enfocarme de lleno en mi carrera y trato de no permanecer mucho tiempo en el mismo lugar.

Cuando termino de bañarme me visto rápidamente y me pongo mi bata saliendo de la habitación encontrándome de frente con una de las enfermeras.

- Disculpe doctor Gibson – dice ella visiblemente nerviosa tratando de no mirarme a los ojos – llego este sobre para usted – me lo extiende.

- Gracias – sin paso por su lado caminando por el pasillo a urgencias donde me encanta estar. Mientras camino observo el sobre en el cual se encuentra la respuesta al traslado que solicite, pero cuando estoy por abrirlo me llega un llamado sobre uno de mis pacientes en la UCI.

Cuando termina mi turno decido doblar por lo que voy a la sala de médicos para descansar un rato. Al acostarme tomo el sobre abriéndolo viendo que mi traslado fue aprobado y que tengo un mes para mudarme. Suspiro antes de cerrar los ojos quedándome dormido profundamente.

"conduzco lentamente observando el hermoso arreglo de flores que llevo en el asiento del copiloto para mi esposa. Desde que la conocí jamás he dejado de enamorarla, me encanta sorprenderla y consentirla.

Al llegar a casa aparco frente a la entrada donde la veo aparecer en la puerta sonriendo amplia mente, mientras tomo las rosas para después bajar del auto.

- Por Dios – dice ella acercándose a mí – están hermosas

- No más que tu – respondo besándola

- Huelen delicioso - dice observándome mientras caminamos hasta la cocina donde busca un jarrón de cristal para poner las rosas. - ¿Cómo estuvo tu día? – pregunta sonriendo y yo a ella.

Comienzo a contarle todo lo que sucedió en mi turno, ella me escucha atenta mientras me sirve un poco de té para dormir que siempre me da para que pueda descansar tranquilo. Ella también comienza a contarme como estuvo su día en el trabajo. Momentos como estos son valiosos para mi.

- Hay algo que debo decirte – dice ella acercándose a mi sonriente.

- ¿Qué sucede? – pregunto abrazándola por la cintura y ella me sonríe mientras sus ojos se llenan de lágrimas.

- Estoy embarazada..." – despierto de golpe con la respiración agitada al escuchar la alerta en el celular, me levanto rápidamente tomando mi bata y estetoscopio para ir a urgencias donde atiendo a un paciente que ocupa gran parte de tiempo de mi turno.

Cuando llego a mi apartamento suspiro al ver lo vacío que se encuentra el lugar, no tengo nada muebles, en la cocina solo hay un refrigerador y lo demás jamás la he usado. Camino hasta mi habitación donde solo hay una cama. Me desnudo y voy al cuarto de baño donde me doy una ducha antes de irme a dormir.

el tiempo pasa rápidamente por lo que no me sorprendo cuando estoy a bordo de un avión rumbo a mi nuevo destino. Mientras estoy en el avión me tomo un par de copas de whisky al tiempo que leo sobre el hospital donde trabajare. Es un hospital militar el cual me hizo una muy buena oferta, aunque el dinero no es algo que me importe, lo único por lo que acepte fue por el reto que representa.

Al aterrizar bajo del avión y luego de ir por mi maleta camino a la salida donde veo que hay un soldado con un letrero en el cual está mi nombre. Me acerco a él presentándome.

- Mucho gusto doctor – dice estrechando mi mano

- No era necesario que vinieran por mí – digo caminando a su lado hasta una camioneta donde nos subimos y durante el camino vamos en silencio hasta la base donde se encuentra el hospital.

Una vez allí el soldado me guía hasta el lugar donde descansare el tiempo que este aquí. Una vez en la casa el chico me explica todo lo que debo saber, también me entrega las llaves de un auto para que pueda movilizarme por la base.

- Gracias – digo antes de que se vaya dejándome solo, respiro profundamente caminando hasta la habitación donde me dejo caer sobre la cama mirando al techo. – ¿hasta cuándo me sentiré de esta forma? – pregunto al aire mientras me pongo de pie yendo hasta mi maleta de donde tomo mi portátil comenzando a ver fotos de mi esposa y la única foto que tengo de mi hijo aparte de las ecografías. – como te extraño amor – digo a la fotografía de mi esposa. Dejo el portátil encendido poniéndolo junto a mi almohada y la observo hasta que me quedo dormido.