.Carla.
Unos meses despues.
Carla—. Hola amor, ¿llegaste?.
Adiel—. Hola preciosa, estaba por escribirte, si, llegamos y ya estamos en el hotel descansando, ¿ustedes?.
Carla—. Recien me despierto y Asa le da duro, pero tengo que preparar el bolsito para viajar.
Adiel—. Te dejé una sorpresita en la cocina.
Carla—. Voy enseguida.
Salgo de mi habitación, porque ahora si puedo andar tranquila ya que nos mudamos a nuestra casa, se siente rarísimo, aun no me acostumbro pero sé que lo vamos a hacer, porque Asaías estuvo medio medio, por eso con Adiel no hemos podido estrenar la casa como debe ser, porque Asaías extraña la otra habitación, tambien, lo creamos ahí y es todo lo que conoce desde su corta vida, porque en los viajes pasa lo mismo.
Sonrío al ver un inmenso ramo de flores en la is
