No puedo evitar la enorme sonrisa que se me dibuja en el rostro ante la presencia de Hunter. Pero él no sonríe. Está absolutamente furioso mientras sujeta a Charles por el cuello. Veo cómo los ojos del viejo degenerado se abren de par en par, aterrorizados, y su semblante palidece, mientras mira a Hunter. Empieza a sacudir la cabeza e intenta soltarse de su agarre, pero lo que hace no sirve de nada ante la furia del zorro plateado. —Te exijo que me... Charles no tiene tiempo de terminar esa frase. Demasiado pronto, Hunter lo arrastra lejos de mí antes de empezar a golpearlo una y otra vez, sin piedad alguna. Escucho a Charles llorar y gritar, clamando piedad porque es inocente y solamente estaba jugando, pero Hunter no lo escucha. —Si vuelves a acercarte a ella, no dudaré en cortarte

