Ana se mete a bañar y suspira con pesar pues ve en su cuerpo los estragos de dos años de estar en coma, está más delgada y su melena débil. Ricardo decide dejarle un tiempo a solas pero él también está deprimido siente lo que ella, y no le gusta verla mal. Un rato después sale y Ricardo la observa que va con pijama de pantalón y buzo mangas largas, el abre la boca en señal de sorpresa y le sonríe. Pasan unos días en que Ana se encarga de su hija y de Ricardo pero lo esquiva en temas íntimos, el ya esta cansado de esa situación y decide enfrentarla. -Ana mi amor, creo que hay un tema que debemos hablar. - Puntualiza - Amanda está dormida, así que no tienes escapatoria. -Ricardo yo...- palidece. -Amor tu me puedes decir lo que sea que te pase como te sientas, pero no me tengas así.

