Solange y Luka estaban viendo los detalles de la boda de Christian y Gina en la oficina. La señora Morales había estado trabajando en varias propuestas, que más tarde, el CEO de la empresa le mostraría en persona. Se había comprometido con Gina a vigilar su evento de cerca, aunque la razón tenía que ver más con el hecho de que quería asegurarse que el ex novio de su mujer se casara.
Solange por otro lado tenía sentimientos encontrados respecto a organizar la boda del hombre del que se suponía que estaba enamorada. Por un momento se preguntó cómo hubiera sido su vida con él, si su padre no lo hubiera deportado. Aunque ese pensamiento se vio borrado por primera vez al ver a Luka de perfil.
— ¿Pasa algo? —preguntó Luka al sorprenderla viéndolo.
— No —dijo la chica un tanto sorprendida—
