Local Cupcake. Léeme... "En el mismo momento en que llegaste...empecé a dilatar..." Este era el modo en que Oliver quería empezar su nueva historia para enviarla a un amigo que había conocido por Internet en un foro de escritores. Wet era una tía de lo más normal, diría yo, de esas tías que sin pretenderlo emanan un rollo intelectual. De mediana estatura, pelo rojo teñido, ojos de ningún color definido que escondían secretos detrás de unas gafas de pasta anchas, labios rosáceos, casi siempre mordidos con esos dientes que procuraba llevar impolutos y unos pechos bastante prominentes en relación a su complexión, esos mismos pechos que cada vez que escribían dejaban asomar sus pezones por debajo de la camisa... y es que a Wet le excitaba escribir. "... empecé a dilatar y sentí desprende

