PDV Anna
Ya era mediodida cuando decidí salir de la casa para poder intentar hacer algo, despues de la discusión con mi hermano, me habia quedado en la cama sin mucho que hacer, y me lamente un poco por como acabaron las cosas en ese Club y con Silvia.
Dure un tiempo alli, antes de decirme a mi misma que lamentarme de ese modo no iba a resolver nada, y tenia que moverme, a fin de cuentas, habian facturas por pagar y con mi suspensión de mi empleo, necesitaba encontrar algo que hacer.
Quedarse en casa, no ayudaria de nada y quizas solo empeorara mi estado de animo, era mejor salir y hacer algo.
Tome el almuerzo, y mi hermano y yo, no nos dijimos nada, el ambiente era muy tenso todavía entre ambos, y era dificil hablar tras la discusión que tuvimos en la mañana.
Aun asi, cuando Sali, me pregunto sobre lo que iba a hacer.
—Voy a resolver algunas cosas, volvere mas tarde —fue lo que le dije al salir.
No me atrevia a decirle aun que me habian suspendido de mi trabajo y no tenia ingresos por ahora…
Quizas eso solo empeoraría todo, eran mejor callarse hasta encontrar algo.
Sali de la casa y empecé a buscar algun empleo en el cual pudiera meterme para asi ganar algo de dinero mientras veia que hacer, pero era mas dificil de lo que pense.
En mi situacion, no podía aspirar a ningun empleo “formal”, siendo que por mi situacion migratorio actual, no me iban a dar nada en ese aspecto ya que nadie queria meterse en algo delicado como eso ahora con el “gobierno” actual.
No tuve otra opción que ir a buscar empleo en alguna tienda o un supermercado de esos grandes, normalmente en esos sitios, solo querían encontrar mano de obra “barata” que usar, y no indagaban mucho en los papeles o el estatus de los demas.
Fue mi mejor opción por ahora, pero aun asi… me senti mal mientras buscaba ese tipo de empleo…
Era como si estuviera retrocediendo varios años en mi carrera laboral en lugar de avanzar, no era facil de aceptar.
Aun asi, no tuve opción, y tras un tiempo buscando, pude encontrar algo en un supermercado algo grande que me aceptaron sin hacerme muchas preguntas al respecto o quien era yo.
Era de eso supermercados, que solicitaban jóvenes entre 18-25 años, para poder pagarle justo el mínimo y que no se quejaran por ello, casualmente cumplía el requisito de la edad, y me hicieron entrar a trabajar ese mismo dia.
Era mejor según ellos, ya que tenia que pasar la “capacitación”, una forma elegante de decir que me harian trabajar 1 semana sin pagarme, aun asi, acepte por que no habia de otra.
Estando alli, Silvia no paro de escribirme a mi teléfono, me lleno la bandeja de los mensajes, tambien intento llamarme, pero rechace las llamadas y al final se conformo con solo escribirme y ya.
No queria hablar con ella por ahora, por lo que la ignore, y deje el teléfono sonando mientras sus mensajes de vez en cuando aparecían.
No sabia bien, si podía seguir el contacto con ella tras lo ocurrido, pero lo dejaría para despues.
Pase el resto del dia, en el supermercado, las horas pasaron rapido, y cuando llego la hora de salida, me fui, era bastante tarde, y llegue en la noche a mi casa, donde mi hermano por su expresión se notaba que estaba molesto.
Iba a hablarle, pero en ese momento, mi teléfono sono, y vi que era Silvia, seguia sin querer hablar con ella, pero llamo justo en el momento ideal para darme una excusa para evitar a mi hermano.
La aproveche.
—Luego hablamos, tengo que responder —le dije antes de tomar el teléfono.
Respondi la llamada de Silvia, y me fui rápidamente a mi cuarto, puse el altavoz para que de ese modo, él pudiera saber bien, que si estaba hablando con alguien.
La voz de Silvia sono en la sala por un instante, y me llamo por mi nombre, antes de que la silenciara de nuevo.
No queria que se le saliera algo comprometedor que pudiera darle sospechas a él.
—Anna, ¿Estas alli? Por favor contéstame ¿Si? —me dijo Silvia.
Ya estaba en el cuarto para ese momento.
—Si, aquí estoy, ¿Qué es lo que ah pasado? —le dije con algo de renuencia.
A este punto, ya no importaba.
—Anna, se que estas enojada conmigo, y con razon pero…
—¿Pero? ¿Vas a decir un “pero” Silvia? Me llevase a ese club, con la idea de “subastarme” para encontrar un marido y asi poder evitar mi deportación, y luego a ultimo momento, cambiaron de idea, y resulta que tenia que acostarme con el que me “compro” y solo acepte por que pensaba que serviría de algo, y luego resulto que no… ¿Qué vas a decir sobre eso? —le dije.
Mientras mas recordaba, mas enojaba otra vez.
—Lo se, lo se, se que las cosas no resultaron bien, yo tambien me culpo, no sabes cuanto.
—Es muy facil hacerlo, cuando no fuiste la afectada —le dije interrumpiéndola.
—Anna… se que la cague, ¿Si? pero no pude saber que asi acabaría todo, yo no controlo lo que hace el gerente o los demas alli, pero se que eso no te basta… pero ¿Sabias que preguntaron por ti en el club? —me dijo.
—¿Por mi? ¿En el club de ayer?
—Si, si, me dijo una conocida alli, que alguien vino y quiso saber sobre tus datos, era una mujer algo mayor en compañía de un hombre, parece que querían saber tu nombre y quien eras y fueron con el gerente para saber mas —me dijo Silvia.
…
Esto no me daba buen sentimiento, ¿Por qué querían saber de mi unos desconocidos? ¿Podrian ser de inmigración?
Oh no…
—¿Puedes venir al club de nuevo Anna? Alli podremos saber mas sobre eso y ayudar al gerente, podria ser bueno para ti, podemos ir esta misma noche ¿Qué dices?
…