KAILANI
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Quiero jugar un rato con Iankook mientras subimos a la habitación. Sé que seremos los últimos en descender de la caja metálica así me pego a su cuerpo tomando su pene y masajeo hasta obtener una linda, caliente y bien dura erección. Es muy chistoso escucharlo intentar disimular los gemidos que se le escapan de vez en cuando.
Quiero sexo del rudo y explosivo, ese que sin importarte nada más que llegar al orgasmo te hace hacer cosas muy locas.
Lo lograré.
Ni bien se termina de bajar la última persona, Kook me da vuelta reventando las cuerditas de mi tanga de baño, levanta mi cuerpo haciendo que lo abrace con mis piernas y, de camino, saca su m*****o del short. Todo en segundos. Aferrando su brazo más a mi cintura, se entierra en mí con ganas, desesperado por darme duro con
