Al despertar, en la habitación sólo nos encontrábamos Sandra y yo; tiré un pie fuera de la cama y luego el Otro, baje de la cama y sentí algo bajo mis pies. Asustada miré y era nada más y nada menos que Sarah durmiendo en mi alfombra, gracias a Dios tiene el sueño pesado y no se despertó, tal vez tampoco lo hizo cuando calló de la cama o bueno cuando yo la patee, no estoy segura. Fui hacia el baño, lave mis dientes e iba a darme una ducha pero me arrepentí, lo haré más tarde. -buenos días. Dijo Sandra. -buenos días. -y tu prima?. -ahí está. Dije señalando la alfombra y Sandra empezó a reír como loca. -la despierto?. -ajá. ..... -no se despierta. -échale agua. Propuse. -no ya me levanté. Dijo Sarah gritando. -no que estabas durmiendo profundamente?. La pregunté. -me voy a du

