Al fin terminé de arreglar todo así que bajé a la Sala. Conecté mis cacos a mi teléfono y empece a cantar y bailar, mientras recogía el desastre que dejaron Samira y Keyt. Sentí una mirada clavada en mi, me di la vuelva y me asusté al encontrarme a Nathan a centímetros de mi. Me quité los cacos. -querías algo?. -si, algo que debí hacer hace unas horas atrás. -qu...? Me quedé a medias porque ya me estaba besando. Puse mis brazos alrededor de su cuello y enredé mis dedos en su cabello mientras le seguía el beso. Era yo o la temperatura está subiendo?. Escuchamos unos carraspeos y nos separamos inmediatamente. Miramos a donde venia el carraspeo y eran nada más y nada menos que mi hermana y Samira, lo que hizo que me sonrojara. -esto aún queda pendiente. Me susurró Nat

