-Idiota ... Ah, y ésto por mi blusa. *** Abro la puerta del pasillo, con James tras de mí y ambos calados hasta los huesos, oyendo aún cómo se ríe por la situación. Todas las puertas están cerradas, seguramente la mayoría estarán comiendo o aún dormidos por el cansancio de ayer, así que aprovecho para, a grandes zancadas, adentrarme en mi habitación y cambiarme, poniéndome rápidamente unos vaqueros y una camiseta simple y salir de nuevo a la sala común en busca de Kylie y Anabeth. Llego al lugar indicado a las cuatro, justo a tiempo, ver a las chicas sentadas en un sillón naranja sin respaldo que es un círculo con un hueco en el centro y se encuentra en la mitad de la sala. -¿Por qué tienes el pelo mojado a las cuatro de la tarde? -pregunta Kylie. -Porque el agua de la fuente del pat

