La Nueva Misión

4226 Words
(Pv Daniel) Terminamos todas las misiones en un mismo día, llevamos a los bandidos a la cárcel y me fue bastante bien, los chicos eran muy amables y agradecían mis hechizos de sanación, por lo que mi confianza había mejorado, sólo quedaba la misión que nos dio la chica del tren, así que Atem fue a solicitarla en el gremio una vez que recibimos las recompensas. Fui por Sora a la guardería que me contó todas las cosas que hizo, sus nuevos amigos y de cómo estaba aprendiendo a nadar. —La maesta dijo que debo paticar mucho mucho pero que voy muy bien—me decía mientras iba a la tienda para comprar ingredientes para un nuevo postre. —Jaja me alegra mucho Sora, hiciste muchas cosas hoy—le decía mientras revisaba los estantes—, mañana también tenemos que trabajar, así que podrás quedarte en la guardería para seguir practicando la natación. —¡Chiii! ¡Gacias papi! —exclamó saltando de alegría—, ¿Papi va a hace oto dulce? —Si, para construir la pastelería, debo practicar muy duro para servir dulces de calidad—sonreí tomando algunos frutos que según mi brazalete tenían un sabor similar a las fresas—, así que debo practicar y aprovechar al máximo que tenemos a muchos amigos para probar. —Aaaaaahhhh ¡Ok! —exclamó muy contento. Reí divertido y terminé de comprar los ingredientes, al salir vi a Héctor leyendo un libro mientras me esperaba, al verme sonrió y saludó a Sora, quien le contaba lo mismo que a mí mientras caminábamos de vuelta a su casa. —Oye Héctor ¿Tus padres vinieron a vivir aquí luego de terminar de subir de rango? —le pregunté mientras Sora corría frente a nosotros jugando con las olas. —No, ellos mandaron a la chingada el trabajo del héroe—rio el chico—, En la Tierra eran inmigrantes que salieron de sus países a Estados Unidos, pero como llegaron de forma legal trabajaban en lo que estudiaron, mi madre era Arquitecto y mi padre Ingeniero, así que al llegar se quejaron de que no tenían ninguna fuerza para ponerse a perseguir monstruos. —Entiendo—suspiré imaginando perfectamente la situación. —De vez en cuando iban a una que otra misión, pero nada serio—dijo mirando el mar—, y la gente de la ciudad no dejaba de quejarse de que invocaron a dos héroes a la vez y no hacían nada, así que tomaron sus cosas y se subieron al tren buscando un lugar donde nadie los molestara, después de todo les obligaron a vivir en este mundo cuando ya se habían adaptado a otro lugar, como en sus países vivieron en la playa eligieron este lugar, mi madre ya estaba embarazada cuando llegó así que cuando nacimos simplemente quisieron vivir en paz. Bajé la cabeza con tristeza, en mi caso tuve suerte de escapar de un peligro mayor pero ¿Y la gente que ya tenía su vida? Nadie le preguntó a los padres de Héctor si querían venir a otro mundo y el hecho de que la Casa Marina por dentro pareciera una casa común de la Tierra significa que sus padres hubieran deseado regresar a casa. —¡Ya déjame en paz, víbora malparía! Me detuve en seco y Sora regresó corriendo para esconderse detrás de mí, Héctor suspiró agarrándose la cabeza con la mano. —Pinche bicho—se quejó antes de mirarme—, perdón es que mi hermana tiene un no-novio que viene cada ciertos días. —¿No-novio? —pregunté confundido. —Bueno no son novios como tal, pero están en esa etapa de que se gustan pero no se confiesan—se quejó—, ya tenemos 27 ¿Por qué no lo admite? A mí no me molesta que le guste una serpiente. ¿Qué? Miré hacia donde venían los gritos y aunque ya estaba un poco oscuro, el sol del anochecer mostraba a Maya peleándose a golpes con un chico, pero este tenía cola en lugar de piernas y la usaba para golpear a la chica sin ninguna restricción. —¡Oye para! —le grité pero Héctor me detuvo antes de señalarme a Maya que le había dado una patada con tanta fuerza que lo derrumbó contra la arena. —Mi madre era creyente de la igualdad de género, así que nos enseñó a que si alguien te pega, tú se lo devuelves—rio—, Ciertamente eso me metió en un par de problemas con las chicas de la ciudad pero eso le ayudó a Maya a defenderse. —Agh…quisssiera que mi hermano dejara de hacer tanto drama y sólo la invitara a salir. De pronto, justo a nuestro lado, había otra persona con forma de serpiente cubierta por una capa negra mirando la escena. Pegué un grito de sorpresa antes de cargar a Sora y alejarme. —No te asussstesss, nuevo héroe—dijo en un tono tan bajo como un susurro y tan ronco que no podía identificar si era hombre o mujer—, no venimos con malas intensionesss, me llamo Asmodeus Leviatán, pocionista de rango B y el idiota que está ahí quejándose del dolor esss mi hermano mayor Lern, viene aquí a molestar a Maya desde que la conoció hace 23 años. —Hola As, pensé que ya estarían invernando—dijo Héctor con calma. —Ah, vimos la misión que tomó Atem y vinimos a darles información a cambio de comida—susurró Asmodeus antes de mirarme—, las cajas que buscan nos están bloqueando el acceso de la cueva de nuestro clan. —¿En serio? —pregunté sorprendido mirando a la serpiente. Por arriba era morada con rombos negros y la parte de abajo era de un color violeta muy claro, tenía el cabello n***o y los ojos tenían el aspecto de una serpiente con un color gris claro o al menos uno de estos ya que tenía un peinado estilo emo que no dejaba ver su otro ojo. —Hemos hecho de todo para abrirlas pero nada funciona, así que cuando vimos que Atem había tomado una misión sobre esas cosas vinimos a guiarles. —Uff menos mal, vamos a decirle a Atem—dijo Héctor tomando mi brazo—, vamos Dani. —S-si…pero…—miré a Maya y al chico llamado Lern que seguían peleando. —Déjalos, vendrán cuando tengan hambre—dijo como si nada—, ven As, puedes ayudar con la cena. —¿Tienen fideosss? —preguntó mientras nos seguía. —Me temo que no, pero Dan hace unos dulces bien buenos—dijo tranquilamente. —¿Dulces? —preguntó curioso. Héctor le contó lo que podía preparar y ambos ignoraron olímpicamente a sus hermanos…comienzo a creer que estoy en una especie de país de las maravillas, porque nadie parece estar cuerdo. ____ Luego de lo que me pareció un par de horas, Maya llegó con varios rasguños en la cara, algunos moretones y la ropa desordenada, seguida de ese chico serpiente que tenía moretones y un ojo hinchado. Héctor me dejó preparar gelatinas de frutas y en cuanto los vi, usé mi magia para curarlos ante la sorpresa de Lern mientras Atem lo saludaba. —Así que eres el nuevo héroe—dijo el chico, que era bastante atractivo, con el cuerpo amarillo y el pecho blanco con cabello rubio hasta los hombros y no llevaba ropa—, mucho gusto. —Un placer—dije tratando de ignorar las malas caras que le hacía Maya—. ¿Gustan gelatina de frutas? —¿Mn? ¿Por qué tienes slimes en copas? —preguntó viendo los pequeños vasos de colores con crema batida y fruta. —No son slimes, aunque parte de los ingredientes son slimes azules, los descontaminé para que perdieran el color y se hicieran líquido para prepararlo y que sea comestible—sonreí ofreciéndole la copa. —Está bueno—susurró As usando su cola para comer, lo que me pareció raro ya que Lern tenía brazos. —¿En serio? —preguntó el chico antes de tomar una de las copas y probar un poco—¡Está bueno! —exclamó antes de comer rápidamente—, ¿Qué es esto? Sabe bien ¿De verdad está hecho de slimes? Maya hizo un puchero mientras comía antes de decir que sabía rico, no tengo idea si de verdad tenían algo, pero al menos ya no estaban peleando como niños pequeños. Nos acomodamos para cenar aunque ya habían probado el postre, igual todos comimos sin problema, bueno más o menos, Atem y Héctor se peleaban por la última pieza de pollo, Risha trataba de ver debajo de la capa de As mientras este la regañaba, Peu devoraba todo mientras Hel lo regañaba por sus modales, Maya regañaba a Lern por no ponerse al menos una camisa y Sora miraba todo muy divertido como si fuera un programa de televisión. Ahora que lo pienso ¿Alguna vez comí con tantas personas? Cuando era niño comía sólo con mis padres, en la escuela, secundaria y universidad comía con Sam y alguno que otro compañero de clases…realmente…me siento muy feliz. —¿Qué pasa, Dan?—me preguntó Atem. —Nada, sólo estoy contento—sonreí. ___ Luego de una cena bastante animada y otra porción de gelatinas, Maya prácticamente empujó a los hermanos Leviatán afuera diciendo que ellos no eran parte del grupo y debían irse, pero Héctor le dijo que tenían información sobre las cajas de la misión. —En nuestra zona, hay dos cajas que anteriormente se encontraban en un barranco cercano a la entrada de la cueva que conduce a nuestro pueblo—explicó Lern tomando un poco de té que Hel nos sirvió—, nuestros abuelos decían que había algo muy peligroso dentro y nunca debíamos acercarnos, pero cuando fuiste invocado había llovido tanto que con un ligero temblor las cajas se cayeron, una entró a nuestra cueva y otra está ocupando la mitad del acceso. —Lo siento—me disculpé de inmediato pero ambos hermanos le quitaron importancia. —No fue tu culpa, fue un accidente—aseguró el rubio. —El caso esss, que hemos tratado de mover las cajas de una forma u otra—susurró As—, magia, palancas, fuerza…ya no sabemos qué hacer y las cajas están ocupando los esssspacios de las puertas que cerramos para el invierno. —Entiendo y como tomamos la misión, vinieron a ayudarnos—concluyó Atem, a lo que ambos asintieron. —Los guiaremos a ellas, incluso les pagaremos una cuota por el trabajo, pero por favor, ayúdenos con esas cosas—dijo Lern antes de que él y su hermano hicieran una reverencia. Atem nos miró y todos asentimos, incluso Maya pese a hacer un puchero asintió sin problema. —De acuerdo, mañana iremos a ver esas cajas. Los dos hermanos dieron las gracias mucho más tranquilos, luego conversamos un poco para conocernos más y después se fueron diciendo que vendrían a buscarnos temprano en la mañana. —Me dormiré aquí—dijo Risha acomodándose en el sofá—, me gusta mucho más que la cama de abajo. —Era un colchón inflable—se quejó Maya. —Es muy suave para mí—dijo cubriéndose con su túnica por completo—, buenas noches. Nos encogimos de hombros y fui a acostar a Sora en el colchón que nos prestó Héctor, Hel y Peu se quedaron en el cuarto de invitados, Atem se acomodó en sofá y así todos nos fuimos a descansar. Pero esta noche a pesar de todo el ejercicio que hicimos, no estaba cansado. Dejé a Sora durmiendo y salí a caminar un rato por la playa, realmente estaba muy emocionado por lo que había pasado en los últimos días, mi lectura y escritura habían mejorado, tuve un viaje en tren, pude ver el mar luego de tanto tiempo, hice varios postres y hasta hice muchos amigos, todos tan raros como yo y que trataban bien a Sora, pero lo mejor es que las tres chicas con las que trabajo no me asustan. —No se me da muy bien lo de ser héroe, pero la idea de ir de aventuras es realmente emocionante —dije en voz alta —, ahora que lo pienso nunca tuve muchos amigos…seguro que a mis padres les encantaría saber de todo esto. —¿Por qué no les escribes? —¡Aaahhh! —lancé un grito de terror cayendo al agua luego de escuchar una voz detrás de mí—. ¡Atem! —Jaja lo siento, es que estabas tan perdido en tu mundo que no pude evitar asustarte—rio antes de ayudar a levantarme. —Si claro, ahora estoy todo mojado en época fría —gruñí molesto, aunque curiosamente no hacía tanto frío como pensé. —¿Y si nadas un rato para entrar en calor? —preguntó quitándose la ropa—, aprovecha que está bastante iluminando. Cuando estuvo totalmente desnudo se metió al agua y comenzó a nadar tranquilamente. —Creí que a los gatos no les gustaba el agua —dije para molestarlo un poco, pero me salpicó todavía más—. ¡Oye! —Entra por las buenas sino quieres que te meta con todo y ropa. Hice un puchero de molestia, pero me quité la ropa igualmente, lo bueno es que estábamos bastante lejos del puerto así que nadie se asustaría de ver a dos hombres desnudos nadando. —No hay tiburones aquí ¿verdad? —pregunté caminando hacia Atem. —Tranquilo, sólo hay medusas venenosas —dijo antes de echarse a reír ante mi cara—, Jajaja ok ok no hago más chistes, anda ven. —Hasta aquí puedo llegar—gruñí molesto. —¿No sabes nadar? —preguntó —Hace mucho que no nado, así que no tengo confianza—expliqué nervioso. Atem me miró sorprendido, pero no dijo nada más, sólo se acercó y nadó cerca de mí. —¿Entonces…qué opinas de los chicos? —preguntó mientras flotaba a mi lado. —Son divertidos, además son muy buenos peleando—reí divertido—, ¿Cómo los conociste? —Conocí a los padres de Maya y Héctor en una misión, sólo la tomaron porque necesitaban materiales, ellos trajeron nuevas recetas de comida, cajas de frío y otros artículos de cocina—explicó—, así que los conozco desde que eran niños, me agarraron confianza muy rápido, y cuando sus padres murieron fui de los pocos que los apoyaron, ellos tenían unos trece años cuando pasó. Eso me sorprendió, no pensé que unos chicos tan animados y alegres hubieran pasado por algo tan horrible. —Respecto a Hel, bueno la conocí en una junta de candidatos a Rey Demonio—explicó—, aquellos que son lo bastante fuertes para estar calificados se les llama a una junta para medir su poder, ella tuvo que ir para buscar algún sello o a alguien que pudiera ayudar a salvar a su padre. —Mmmm entonces ¿Esos sellos bloquean tus poderes? —pregunté. —Si, es una forma de proteger al usuario y a los demás, pero también sirve para entrenar—explicó—, si tienes tu poder bloqueado, eres un humano normal, así que debes ingeniártelas para ganar sin tu magia, yo por ejemplo tengo un par de sellos—se dio la vuelta y en su espalda pude ver dos tatuajes con forma de círculos mágicos—, por mi nivel, no podría controlar mi magia, tal vez cuando suba a rango A pueda liberar uno, pero quien sabe. —Entiendo—asentí mirando el cielo nocturno. Subir de rango…los chicos mencionaron que Atem fue traicionado por alguien que amaba y le entregó la mitad de su vida. —Oye Atem ¿Puedo preguntarte sobre ese tipo que te engañó? Sus orejas se tensaron al igual que su rostro, me disculpé rápidamente pidiendo que lo olvidara, pero él levantó su mano para callarme. —Creo que tienes derecho a saber—dijo con un tono de tristeza—, trataré de resumir lo que pueda, aunque es una historia larga y aburrida—me miró con una pequeña sonrisa triste— ¿No te importa? Sonreí y negué con la cabeza, antes de que Atem volviera a mirar el cielo nocturno. —Soy el quinto hijo del líder de una manada de gatos salvajes, mi madre era la tercera esposa y resulta que fui de los cachorros más fuertes, superando incluso a los hijos de sangre pura, mi madre era una kitsune, es decir, un demonio zorro, así que a la gente no le hizo ninguna gracia que un mestizo pudiera ser el próximo líder de la manada—explicó cansado—, así que luego de la muerte de mi madre me fui, decidido a formar mi propia manada, sin ayuda de mi padre o mis hermanos. Asentí entendiendo un poco de lo que decía, ya estaba acostumbrado a que en este mundo la poligamia era normal, todavía no había conocido a alguien con varias parejas pero ya estaba mentalmente preparado. —Era un niño estúpido que creía que el mundo era un lugar increíble, que yo era más listo que los demás y nadie me engañaría—gruñó avergonzado. —Entiendo el sentimiento—suspiré avergonzado, él me miró divertido y continuó. —Entonces lo conocí, era un noble de baja categoría y todos lo molestaban, así que lo metí en mi grupo, tuvimos muchas aventuras y momentos muy agradables, me contó su vida y él supo la mía, antes de darme cuenta creí que me había enamorado. —¿Creíste? —Cuando me pongo a pensar, no creo que fuera realmente amor, sólo quería protegerlo…nunca me vi a mí mismo con él formando una familia o estar a su lado en las buenas y las malas—explicó—, como te dije era un niño estúpido…no lo pensé dos veces e hicimos el ritual para darle la mitad de mi vida, creí que así estaría tan agradecido que seríamos imparables, además él tenía una enfermedad que le impedía tener una vida normal…o eso me dijo…al final resulta que sólo quería el mérito de ser un noble aventurero, se llevó todos mis logros, mis objetos valiosos y mi tiempo de vida. No sabía qué decir ante esa confesión…¿Lamento que te engañaran? ¿No fue tu culpa? lo miré tratando de buscar las palabras apropiadas pero no se me ocurría nada. —Me lo busqué yo solo, fui un estúpido arrogante—explicó—, aún hoy estoy pagando las consecuencias. —...Ojalá pudiera ayudarte en algo—suspiré—, dudo mucho que me hubiera inscrito en el gremio sin tu apoyo—me miró sorprendido—, y no me has ayudado solo a mí, Risha, Maya, Héctor, Hel, Ur y Rose también han recibido mucha ayuda de tu parte y todos quieren ayudarte como lo has hecho tú. Sus orejas se bajaron y sus mejillas se sonrojaron, se veía tan lindo que parecía un gatito, lo que me recordó a lo que comentó. —Entonces ¿Eres mitad zorro y mitad gato? —Si, pero mi sangre de gato es más fuerte—comentó desviando la mirada. Nos quedamos en silencio un rato, luego regresamos a la orilla y nos sentamos un rato en la arena desnudos. —¿Y tú Dan? ¿Cómo fue tu vida antes de estar en el sótano? Me acosté en la arena pensativo, era extraño pero no sentía ninguna vergüenza de estar así con Atem a mi lado. —Fui hijo único, mis padres eran pasteleros, no eran famosos ni nada pero tenían mucha clientela—sonreí recordando esos tiempos—, mi madre era amable aunque muy exigente con el trabajo, jaja daba miedo cuando los clientes se quejaban por tonterías, si era algo realmente serio se disculpaba intensamente y hacía hasta lo imposible para resolver el problema, mi padre era tranquilo aunque muy detallista con los dulces, ambos se complementaban muy bien. Cerré los ojos recordando esas tardes donde me enseñaban a hacer pasteles, me apoyaban con las tareas y nunca faltaban a mis eventos de la escuela, siempre decían que estaban orgullosos de mí y cuando conocieron a Sam quedaron encantados con ella. —Incluso me dieron parte de sus ahorros cuando dije que haría mi propia pastelería—recordé sonriendo—, hubiera deseado al menos despedirme de ellos y que supieran que al fin soy libre de esa mujer…—en eso recordé lo que había dicho—. ¿A qué te referías con escribirles cartas? Se levantó y comenzó a estirarse moviendo la cola, su trasero un poco más claro que el resto de su cuerpo era firme, al igual que sus piernas…espera ¿Por qué me estoy fijando en ello cuando estábamos hablando de algo serio? —Hay una tradición en la que le escribes cartas a los muertos y después las quemas, nadie sabe si realmente las reciben, pero te sientes un poco mejor si crees que sí—dijo antes de mirarme—, no pierdes nada con probarlo. Le di las gracias mientras me levantaba y caminaba a su lado, había pensado en algo y creo que era el momento perfecto. —Atem, puedes utilizarme si quieres. —¿Perdón? —me miró confundido. —Quiero que subas de rango y seas el más fuerte—dije seriamente colocando mi mano sobre mi pecho—, así que si lo que necesitas es tener sexo conmigo, lo haré con gusto. Me miró boquiabierto casi en shock, ¿Tal vez me pasé un poco? —Dan, ya te dije que no tengo la intención de engañar a nadie—insistió pero yo le detuve. —No me estás engañando, yo quiero que me uses, lo digo en serio—aseguré—, quiero que mejores y seas tan fuerte que nadie te menosprecie—su expresión no parecía del todo convencida—, Atem por favor, aunque soy un mago blanco sus heridas son tan leves que apenas soy de ayuda, lo más grave fue la lesión de Risha pero fue sólo una vez, te lo pido, déjame apoyarte ¿Qué quieres que haga? Si te avergüenza hacerlo con un hombre me puedo vestir de mujer y… De pronto comenzó a reír a carcajadas agarrándose el estómago de tanto reír. —¡Jajajajajaja! ¡Para! ¡Esto es demasiado! ¡Jajajajajajaja! —exclamó divertido antes de acercarse a mí a pocos centímetros—, ¿No será una excusa para ponerte un vestido? ¿O será que quieres que te la meta tan fuerte que no puedas caminar? —sentí que la cabeza me iba a estallar—, jajaja, eres un pervertido, con razón no sientes vergüenza de estar desnudo. —¡F-Fue porque estoy a-aquí contigo! —exclamé avergonzado pero entonces me abrazó y me besó salvajemente. —De acuerdo, entonces te usaré—sonrió antes de acariciar mi trasero, haciendo que lanzara un gemido—, ¿Sabes? Puede que no tenga pareja pero he tenido relaciones con varios chicos, así que tengo experiencia—desvié la mirada nervioso—, pero en tu caso es la primera vez que conozco un chico que le gusta vestirse de chica ¿Qué debería hacerte? Me puse muy rojo sin saber qué decir ¿Debería contarle lo que hacía con mi esposa? —Y-yo…estoy acostumbrado a usar ropa interior de chica—confesé—, a veces Sam y yo cambiábamos de ropa, incluso decía que le quedaban mejor a mí que a ella, de hecho a veces me bajaba los pantalones para molestarme y decía “Si llevaras falda te la levantaría”, yo se lo devolvía a veces…creo que éramos más unos niños molestos que una pareja de casados. —Bueno, en la intimidad de tu casa no creo que haya problemas, siempre que sólo sea para divertirse—dijo colocando sus manos en mi rostro—, ¿No te sientes mal estando conmigo? ¿Sientes que la estás engañando? Abrí los ojos sorprendido, realmente no había pensado en eso, ¿Estaba traicionando a Sam al tener sexo con Atem? ¿Está mal lo que hacemos? —Piénsalo y dime tu respuesta luego—me dijo antes de volver a besarme—, no quiero que sientas culpa ni nada, yo…todavía tengo miedo a la traición aunque sé que tú no eres como…él—lo miré sorprendido pero se alejó tomando su ropa—, me agradas Dan, hace mucho que no me sentía así…pero no confío en mí…no quiero hacerte daño—luego me miró y sonrió—, qué extraño, me gusta estar contigo cuando apenas tenemos unas semanas de conocernos. Y se fue dejándome atrás, comencé a sentir frío así que me puse el pantalón antes de entrar, la arena me molestaba pero no podía simplemente tomar un baño, así que me acomodé en el sofá y traté de dormir, lo cual fue muy incómodo y molesto.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD