Salto De Fe

Capítulo 12 - Extra 1

13 de Marzo del 2027

— Dos meses antes del presente —

( Ufa / Rusia- Salavat Yulaev Monument )

" El Cumpleaños De Sebastian "

¡¡Este es un lugar increíble!!- exclamo contento Sebastian, sosteniéndose de la barandilla del acantilado que tenía en frente una hermosa vista del río Belaya, y una hermosa vista de enormes e inmensos jardines, gritando sus palabras al enorme lugar, ganándose moradas extrañadas de los demás turistas que visitaban el monumento

La pelirroja soltó una tierna risa mirándolo, mientras sostenía la mano de Hatson, ambos estaban aliviados de que realmente le gustará, pasaron varias semanas planeando ello

El pelinegro se volteo a ellos con su enorme sonrisa en su rostro, completamente contento. Él, realmente no tenía planeado nada para su cumpleaños ya que seguía distanciado de su gemelo, Mikaelis

Me alegra que te guste mi amor- tarareo contenta la pelirroja, soltando la mano del ojis verde para acercarse a él, Sebastian sonrió ampliamente y se acercó a ella para abrazarla por la cintura y elevarla al aire, dando un par de vueltas con ella en brazos, ella soltó una risilla sumamente feliz aferrándose a él

¿Gustarme?, ¡me encanta!- dijo emocionado, besando las mejias de su mujer

Y eso que aun no has visto nada- se burlo el ojis verde, mirándolos, con las manos dentro de sus bolsillos y una sonrisa plasmada en su rostro mientras los veía

¿Hay más?- pregunto, incrédulo causando la risa de su hermano y su pareja

¡Claro que hay más, ¡es tu cumpleaños!!- chillo contenta la pelirroja, abrazándolo con cariño, los ojos celestes del pelinegro brillaron en emoción, asintió a ellos

Abrazo a su preciosa mujer por la espalda regresando la vista al enorme lugar, él, por la mañana. Había creído que se habían olvidado de su cumpleaños, y salieron de casa con la excusa de que había un viaje de negocios de última hora y que Lyra quería ir con ambos al lugar, el se durmió en algún punto del camino por la noche tan horrible del día anterior, y despertó simplemente cuando lo despertaron, desorientado y más dormido que despierto, empezaron las sorpresas

Un enorme globo de feliz cumpleaños era sostenido por su mujer, mientras su hermano le lanzaba serpentina y confeti encima; la felicidad que lo inundo en ese momento, fue inexplicable, más aún, luego de haber creído que ellos habían olvidado su cumpleaños

Ven, vamos, por allá esta la plaza, hay algunos puestos, y según se, luego harán un par de actividades aquí.- miró la pelirroja a su pareja, besando su mejía

Guienme- tarareo sin borrar su sonrisa, mirando a su mujer y su hermano de forma intercalada

Los tres pasaron un día agradable, entre juegos, risas, charlas y bromas. Sebastian estaba más que contento de pasar un día tan importante como su cumpleaños, con ellos, su hermano favorito, luego de lo ocurrido meses atrás, y la mujer que más amaba en el mundo

¿Estás cómodo con ello?- pregunto la pelirroja mirando al ojis celeste, él sonrió de forma dulce mirando a su hermano jugar uno de los juegos de la feria que se encontraron yendo al hotel

Claro que si, es su cumpleaños. Además, luego te puedo romper yo- sonrió de forma pícara mirándola, causando el sonrojo de ella

Hatson...- se quejo ella completamente avergonzada con su rostro enrojecido, el beso la mejía de Lyra

Esta bien corazón, sabes perfectamente que no tenemos problemas entre nosotros, ni antes, ni ahora.- le sonrió de forma dulce

Pero- eso es cuando no estamos juntos, ¿pedirás otra habitación?- le miró con curiosidad

Ya tengo una habitación amor, en el mismo hotel.- tranquilizo, ambos miraron a Sebastian cuando esté chillo contento porque al fin había logrado tirar todas las botellas y ganado aquel peluche gigante que llevaba rato queriendo conseguir- no te preocupes, corazón, disfruten la velada.- acaricio la espalda de ella con calma, mirando a su hermano quien recibía su enorme peluche de conejo, se acercó a ambos cual niño pequeño abrazando el peluche

Por fin- festejo el mirándolos con una amplia sonrisa

Que bien mi amor- festejo Lyra con ternura mirándolo

Ya era hora hermano, se hace tarde- se río Hatson mirándole, Sebastian hizo un puchero

Si, si. Lo siento, vamos- dijo a ellos con una sonrisa

Los tres caminaron con calma, no estaban lejos del hotel en el que se quedarían, Hatson, a mitad de camino, le quito el peluche a Sebastian para que pudiera tomar la mano de Lyra con comodidad

Al llegar al hotel Hatson mintió diciendo que se adelantaría a la habitación mientras ellos se quedaban en recepción mirando unos gatitos que el lobby del hotel daba en adopción

Ambos tenían una enorme y tierna fascinación por los animalitos, así que se quedaron casi una hora jugando con los cinco gatitos de colores divertidos

Uy, se hizo muy tarde- se rió Sebastian mirando su teléfono-, vamos ya, linda, seguro Hatson estará enfadado- se rió. Ella asintió y dejó a los gatitos en el sofá donde estaban antes y se puso en pie junto a él pelinegro

Ambos entraron a la habitación con calma hablando entre ellos respecto a los gatitos, considerando llevarse uno antes de irse, pero tendrían que hablarlo con Hatson también para que se tomara una decisión

Iré a darme un baño rápido- dijo al pelirroja mirando a su pareja

Claro, yo voy a cambiarme de ropa- dijo el pelinegro con una tierna sonrisa, empezó a desvestirse con calma mientras escuchaba de fondo como su mujer abría la regadera para darse una ducha

Unos minutos después, Lyra salió del baño mientras Sebastian terminaba de ponerse el pijama

Oye mi amor, sabes, Hatson no esta en la habitacion, busque sus cosas y nada.- prácticamente se quejo entre un gruñido el, volteando a ella mientras terminaba de ponerse la camisa, quedó en silencio al verla, ella estaba completamente desnuda frente a el con su cabello rojo-naranja completamente empapado cayendo por sus hombros y espalda, su piel blanquecina parecía yogurt ante la humedad por el baño anterior, y el rostro enrojecido de ella le daba el toque perfecto, despertando su morbosidad completamente

《 ¿Linda ... ?- murmuro el pelinegro en tono ronco, pasando su mirada por cada rincón del cuerpo de ella, desde que habían regresado a ser una, extraña, pero feliz pareja, no habían tenido oportunidad de tener intimidad entre ellos ni una sola vez, pasaban el tiempo disfrutandose entre sí con películas y citas para recuperar el tiempo perdido, a ninguno, le pareció una prioridad el tema de la intimidad s****l, se hacían el amor a cada momento entre risas y momentos tiernos

Pero verla de esa forma frente a él, hacia que hasta los más sucios pensamientos morosos despertarán sin su permiso, así como su polla palpitara dolorosamente bajo la tela de su pantalón pijama mientras la miraba, desde la punta de sus dedos de sus pies perfectamente cuidados, hasta la última ebra de su cuero cabelludo sobre su cabeza

Feliz cumpleaños- murmuro ella, mirándole a los ojos con nerviosismo, Sebastian trago en seco, mientras ella se acercaba lentamente a él continuando sus caderas y su cabello rojo-naranja largo caía por sus hombros hasta cubrir sus pezones rosados

Dios mio...- gimió Sebastian mirándola frente a él, era más baja que él por una cabeza, trago en seco mientras pasaba una de sus manos por la cintura de ella con delicadeza, conteniendo un suspiro de placer ante la suavidad de su piel- mmmm- contuvo un gemido, cuando ella bajo de un solo movimiento el pantalón y el bóxer que usaba para dejar libre su erección- linda- le miró atentamente, mientras ella se arrodillaba ante él

No sabes... cuando e esperado por hacer esto con ustedes- soltó un leve suspiro, sosteniendo la polla erecta de Sebastian entre sus manos, mientras pasaba lentamente su lengua por la punta de su pene, mirándolo a él en todo momento- pero... estaban tan contentos simplemente conviviendo conmigo, que creí que sería irrespetuoso o fuera de lugar insinuarselos- siguió, pasando su lengua por todo el falo de él

Lyra- jadeo Sebastian mirándola atentamente, sintiendo su polla gotear ante la vista ta sexy que tenía de su mujer, jadeo al sentir como ella metía toda su dureza en su boca y chupaba de su pene como si de una deliciosa paleta se tratase

Los gemidos pronto inundaron la habitación, los sonidos lascivos que hacía la boca de la pelirroja exitaban cada vez más a Sebastian, arrastrándolo a la poca cordura, tomo la cabeza de ella y empezó a embestir su boca sin piedad, empujando sus caderas y empuñando el cabello rojo-naranja de ella en sus manos con fuerza

Lyra gemia y jadeaba, enterrando sus manos en las caderas y piernas de él sin apartar su mirada en ningún momento de Sebastian extasiada ante sus expresión y sus gemidos, rodó los ojos cuando sintió, como la punta de su polla chocaba con su garganta sin piedad, más aún así disfruto de ello, su saliva empezó a desbordar de su boca deslizándose por su cuello ante la rapidez y fuerza con la que su novio follaba su boca

No mucho después, Sebastian estalló en la profundidad de su garganta gimiendo alabanzas para ella, ella jadeo y sorprendida más aún así trago todo, desbordando un poco aquel viscoso y blanquecino líquido de sus labios deslizando por su garganta, Sebastian, fuera de sí, la elevo y devoro su boca con vehemencia mientras la cargaba para tirarla a la cama, Lyra correspondio el beso a como pudo daba la falta de aire

Soltó un gritito cuando fue tumbada en la cama, gimió levemente mirando como su hombre terminaba de sacarse la ropa y subía sobre ella

Sebas- gimió ella mirándole atentamente, el subió a la cama y abrió sus piernas con fuerza, ella gimió arqueando su espalda cuando él, sin previo aviso, colo tres de sus dedos en su coño goteante de humedad ante la exitacion

Eres una buena niña- gimió él de forma ronca contra sus labios, follando con sus dedos a la pelirroja sin piedad alguna preparándola para él- tan buena niña- siguió, gimiendo a su oído, antes de bajar sus besos húmedos por su cuello

Ella gemia de forma baja, enterrando sus uñas en la espalda de él mientras sentía los espasmos recorrerla anunciando que su orgasmo pronto llegaría

Se corrió en la mano de él, gimiendo de forma lasciva su nombre mientras el mordía y besaba sus pechos

Sebastian, ya mételo- rogó ella mirándole, él sonrió de forma ladina, mordió el pezon de ella acomodando su polla en su entrada, ella gimió de placer- ¡Sebastian!- regaño ella, cuando simplemente el se rozaba con ella, gimió alto cuando el entró en ella sin previo aviso, llegando hasta el fondo de su canal

Empezó a embestirla con fuerza y profundidad, disfrutando del ardor en su espalda ante los arañazos que daba ella por el placer, tomo una delas piernas de ella entrando y saliendo con rapidez, causando que la habitación se llenará de ese choque de piel contra piel y los gemidos lascivos de parte de ambos

Sin duda alguna, esa sería una noche en la cual ninguno de los dos dormiría.