+ALEXEI+ Voy en el auto con ella. No sé de dónde demonios saca tantas ocurrencias. Cada palabra suya parece sacada de un mundo paralelo donde el descaro y la ingenuidad se mezclan. Y lo peor es que me hacen reír. Yo, que no me río con nadie. Me preocupa eso de su memoria. Y no entiendo por qué diablos me preocupa. En teoría, no debería. Es su problema, no el mío. Pero ahí estoy, dándole vueltas a lo que pasó con el accidente, al que la atropelló, a si recuperará o no los recuerdos. Y, aunque no lo digo en voz alta, lo noto: no trabaja como antes. No es la Ivanna que conocía. No debe recordar… o sí. Y esa incertidumbre me carcome. Respiro profundo, tratando de calmarme, de enfocarme en lo mío. Pero mis ojos, traicioneros, se van directo hacia la abertura de su vestido. Maldición. Ella ni

