(Nigromante narración)
Sabía que según lo dispuesto por Alejandro, Jon y yo debíamos andar en el pueblo al pendiente de cualquier imprevisto. Así como también pronto debíamos volver y hacer presencia en el castillo para estar vigilando las pisadas de la General, quien ya seguramente se encontraba en la fortaleza, aunque el deber sería más específicamente para mí.
Andando entre el bosque había notado la presencia de una gran tropa. Justo cuando contemplaba entre las ramas a quienes podrían haber enviado, Jon apareció justo a mi lado. Como yo, se cercioraba de lo mismo, del líder que encabezaba el grupo de soldados. Sin embargo, al recordar la presencia de Asídemes preferí sugerirle algo.
—Jon, espero que seas consciente de lo que está pasando.
Se volvió a mi ceñudo.
—¿A qué te refier
