🦋✨ VALERIE ✨🦋 Cuando salimos del restaurante y entramos al coche de Tara, apretando los ojos, solté un suspiro tembloroso y apoyé los codos en el tablero. Me masajeé las sienes en un esfuerzo por combatir un dolor de cabeza palpitante que me hacÃa sentir como si mi cráneo se iba a partir en dos. La tensión corrió a través de cada músculo de mi cuerpo y sentà el peso en mi nuca. —Tenemos que dejarlo, Sebastien. Voy a ir a la corte el lunes y haré los cambios que tengo que hacer a la orden de alejamiento. —¿Qué? ¡No, Valerie! —SÃ, Sebastien. Debemos aceptar que hay batallas que no se pueden ganar por más que uno luche. —De ninguna jodida manera. Tengo amigos que son abogados y muy buenos. No vamos a aceptar cualquier cosa que este idiota quiere hasta que hable con uno. Levanté la cabe

