Nada de lo que puedas hacer cambiará el hecho de que estoy molesta contigo.
Evan solo podía pensar en lo bonita que estaba cuando se enfadaba y eso así complicadas las cosas para Abby quien al sentir la mirada sobre él, estaba demasiado nerviosa.
—¿Por qué me miras?
—Estás roja.
Ella se encogió de hombros.
—Es porque estoy enfadada y…¡Dios!—el ascensor pareció temblar y entonces las luces de dentro se apagaron. Soltó un grito y despues buscó al hombre con sus manos hasta que dió con su pecho y se abrazó a él—. ¿Qué fue eso? ¿Vamos a desplomarnos?
—Shh, tranquila, seguramente solo se fue la energia electrica y el ascensor paró de golpe. Regresará y entonces nosotros continuaremos el camino hasta la plata baja.
—¿Y si no regresa?
—Los bomberos nos sacarán de aquí.
—¿Bromeas
