Cicatrizes del Pasado

Capitulo 3

Mia Isabella

Después de ese accidente no quise bajar, unas horas más tarde ya todos se habían ido, ya mis padres estaban dormidos así que decidí salir al jardín un rato.

Todo ha estado muy calmado en la manada asi que no hay muchos guardias por ahi…

Tomo mi bata color pastel y salgo sin hacer ruido,tratando de caminar a pasos muy sigilosos..

Miro la hora y son las dos de la madrugada y no tengo sueño.

Estoy triste, Kaylen al verme parecía que estuviera mirando a una cosa rara, lo se era normal su reacción no lo culpo.

Llego al jardín y veo ya todo ordenado, que rápidos son, se que la fiesta no duró mucho después de que me fui.

Tengo tanta tristeza acimulada…

Josh después de eso insistió para que yo saliera pero no quería ver más a Kaylen, mis padres también pero no podía, no quería ver como me rechazaba, esto es tan difícil.

De solo pensar en ello se me desgarra el pecho..

Mi hermano por poco me arrastra hacia la fiesta, pero no, lo convencí para que me dejara en paz, también me invitó a salir con nuestro primos pero no quise tampoco.

Pedí a mi madre que me disculpara y que les dijera que no me sentía bien.

Miro las estrellas y casi no hay, hasta la luna está escondida.

Después de unos minutos entro a la cocina y voy por mi pastel, ni siquiera eso probe.

Todas mis primos fueron hasta la habitación y se despidieron de mí, hasta Nora y Alessandra fueron a despedirse, pero él ni se asomo ni nada.

Dimitri no apareció más.

¿Dónde estará mi hermanito?

-Esto está delicioso - susurro y como otro bocado de pastel.

Pastel de tres leches chocolate y fresas, me encanta.

Creo que soy la única que se le ocurre comer pastel tan tarde.

Al terminar dejó con cuidado el platillo lavado y subo a la habitación nuevamente para ver si puedo dormir ahora si.

Al entrar veo que la ventana está abierta.

-¿Yo la deje abierta?- me pregunto cerrando la puerta a mis espaldas y voy hasta la ventana.

Al llegar a la ventana asomó la cabeza y miró a los lados y luego abajo.

-Quizás se me paso cerrarla - susurro extrañado y cierro la ventana con llave para estar más segura.

Me quito la bata y quedo con solo mi pijama, bueno sí es que se le puede llamar pijama a algo tan pequeño, pero de todos modos no importa, nadie entra a mi habitación sin avisar.

Al acostarme me tenso al sentir el otro lado hundido, al girar intento gritar pero su mano cubre mi boca.

-Shh, tranquila - dice tranquilo y mi corazón se acelera rápidamente.

Cierro los ojos y lloro asustada.

-Mmm - murmuró negando con la cabeza y él se hace a un lado y enciende la lámpara.

Al ver su rostro quedó sorprendida, ¿que carajos hace Kaylen en mi habitación?

Mi corazón va a explotar..

-Hola mi princesa - dice mirándome con sus brillantes ojos color azul,pasa su pulgar mis mejillas y limpia mis lágrimas.

-¿Qué, qué haces aquí? - tartamudeo nerviosa y me levanto despacio de la cama.

-No te voy hacer daño - dice serio y me coloco de pie.

Él rápidamente se coloca de pie y está enfrente mío.

-Pues como saberlo, una persona normal no entra a una habitación cualquiera a las tres de la madrugada - digo mirándolo mal y él sonríe.

Hermoso.

-Pues no soy una persona normal princesa, y no entre a una habitación cualquiera, entre a la habitación de mi princesa, mi alma - habla seguro y me abraza de la cintura pegándome a su cuerpo.

-De, deberías irte - susurro y cierro los ojos al oler su fragancia varonil.

Huele tan bien que me desconcentro en el instante..

-No puedo, has cerrado la ventana con llave - dice con gracia y me separo de él.

-Por eso no hay problema, yo te abro - aseguro y voy hasta la ventana pero me detiene sujetando mi mano y vuelvo a quedar enfrente de él.

Levantó la mirada y pasó duro, ¿por qué me mira así?

-Pues yo no quiero ir me - sentencia y se lanza a la cama sin soltarme.

-¡Kaylen!- grito molesta.

Me levanto rápidamente al ver que quedo encima de él.

-¿Por qué me esquivas?, sabes que soy tu alma - dice mirándome con los brazos cruzados.

-¿O es que le eres fiel a alguien más? - pregunta serio y lo miro frunciendo el ceño.

-¿Qué, de qué hablas? - pregunto molesta y sigue serio.

-¿Dime que tienes con ese tal Josh? - pregunta y se coloca de pie.

Frunzo el ceño y cruzo mis brazos.

-Increíble - susurro molesta y niego con la cabeza.

-Sabes que, quedate tranquilo que yo me voy a otra habitación - hablo molesta y al tocar la manija él me detiene.

-No, tu no sales de aquí, entiende una cosa tu eres mía, eres mía antes y después de nacer, me perteneces únicamente a mi. - habla entre dientes y lo empujó sorprendía.

Este ya se volvió loco con los golpes que se dio con Ian.

-Vete al carajo Kaylen - alzó la voz molesta.

-Que te crees para venir y decirme todo eso después de que hayas arruinado mi cumpleaños, y no conforme con eso golpeas a mi primo y vienes a mi habitación como si fueras el dueño de la casa - hablo molesta y siento mis manos arder.

-Y qué hay de tu amigo - dice con enojo y ríe sin gracia.

-¿Mi mejor amigo? , es mi mejor amigo, lo conozco de hace muchos años - aseguro molesta y él no despega su mirada de mis ojos.

-Vamos a dormir - dice y sujeta mi mano pero me suelto.

-¿Qué quieres? déjame en paz, no se que haces aquí, vete de mi habitación, ya - digo alejándome de él y de pronto aparece enfrente mío.

-Nunca voy a dejarte en paz, eres la mujer más bella que mis ojos hayan visto, tienes una belleza única, eres preciosa, hermosa, bella y muy mía, solo mía, solamente me perteneces a mí - asegura y me abrazó hundiendo su nariz en mi cuello y trato de alejarme.

Siento un remolino de emociones al decirme eso, pero no se si me estará diciendo la verdad, pero para qué me mentiría, no sería capaz o ¿si?

-De, deberías irte - susurró tratando de controlarme.

-Yo se que no quieres que eso pase mi princesa - asegura y suspiro.

-No me conoces principito - digo sería y me alejo de él.

-Puede, pero si se que me quieres a tu lado - dice sonriendo y ruedo los ojos.

Voy hasta mi armario y le doy una sábana y una almohada de mi cama.

-Ten, o duermes en el sofá o duermes en otra habitación - hablo lanzándole la sábana y él la atrapa con facilidad.

-No - sentencia y entre cierro los ojos.

-Mejor dormimos juntos o dormimos juntos - propone y sujeta mi mano para caer en la cama.

-Kaylen - digo molesta y él me abraza.

-Ya duerme gruñona, se que tienes sueño - asegura dejando un beso en mi frente.

No me queda de otra, si tengo mucho sueño, no he dormido nada y ahora este tonto aparece y me interrumpe el sueño.

-No respondo si mi papá te saca a patadas, estamos en su manada así que yo no voy a intervenir - miento, clara miente si estoy mintiendo, no dejaría que mi padre le hiciera daño.

-Tu no te preocupes por eso mi amor - asegura y sonrió.

Me dijo mi amor, eso sonó hermoso.

Kaylen

No quería arruinarle la fiesta a mi princesa por ser tan impulsivo, tan idiota, ahora está dormida entre mis brazos.

Es hermosa, sus ojos tan llamativos y ese cabello único y natural, su piel suave como la seda hace que no quiera soltarla nunca.

Me gusta ver como se enoja, sus mejillas toman ese leve color rojizo mientras sus manos parecen encenderse en fuego, me encanta, es mia, es solo mía,su nombre muy bien lo dice, es mía, mía totalmente mía.

-Te adoro princesa - sonrió abrazando la y siento sus brazos abrazarme.

Mia Isabella

Escucho unos toques en la puerta y me remuevo .

-Hija - llama mi padre y abro los ojos encontrándome prácticamente encima de Kaylen como un koala.

-Por los dioses - digo alarmada y cubro mi boca callando un grito.

-Hija, ¿estás bien? - pregunta mi padre y asiento.

-Si, si papá todo bien - aseguro y muevo a Kaylen pero este no se despierta.

-Bien, tu madre y yo saldremos un momento, regresamos un poco tarde - informa y suelto el aire de mis pulmones.

-Está bien padre, que les vaya bien - digo y me levanto.

-Gracias mi niña, no olvides que hoy tienen descanso todos en la mansión así que estarás sola, recuerda comer - dice y ruedo los ojos.

-Si papá, ya lo sé, no soy una niña - digo obvia y él ríe.

Abro la puerta y no veo a nadie, la vuelvo a cerrar y escucho la carcajada de Kaylen.

-Pensé que le ibas a decir a tu padre que el principito entró a tu habitación sin permiso - dice burlón y le lanzó un cojín del sofá.

-Estabas despierto todo este tiempo, eres un - pero me detengo y cierro los ojos para respirar profundo.

-¿Un que? - pregunta con gracia y al abrir los ojos ya está enfrente mío.

-Un idiota - digo molesta y él se acerca peligrosamente mientras me mira como si fuese su presa.

-Así que un idiota - dice pensativo y asiento nerviosa al tenerlo tan cerca.

-¿Qué, qué haces? - digo nerviosa al sentir su aliento cerca de mis labios.

Siento un remolino en el estómago, quizás solo sea hambre.

-Mi hermosa - dice y miro sus ojos y después sus labios, son tan llamativos, me provoca lanzarme y besarlo.

-No - digo y lo esquivo.

-¿No?- pregunta confundido y lo miro.

-Nada, olvídalo - digo mirando a otro lado.

-¿Podrías salir para poder arreglarme? - pregunto sin mirarlo.

-¿Pero por qué? - pregunta y se sienta en el sofá.

-Alguien podría verte - digo mirándolo y él sonríe.

-No me mientas hermosa, se que nadie está en la mansión - asegura y me tomó de la cintura logrando que ambos caigamos en la cama.

-Estamos solos hermosa - dice mirándome a los ojos y mis mejillas se calientan.

-De, deja de jugar Kaylen, además tu familia te ha de estar buscando - digo tratando de apartarlo.

-No estoy jugando, además mi familia ya sabe, o bueno si leyeron mi carta lo sabrán - dice y sonrió.

-Kaylen amor, ¿podrías apartar te? - pregunto cariñosa y sus brillan.

Kaylen afloja su agarre y salgo rápidamente para ir al baño y cerrar con llave mientras río.

-Mia,oye eso fue trampa - se queja y río.

-Yo pensé que me decías amor porque de verdad soy tu amor - dice triste y mi corazón se estruja al escucharlo.

Muerdo mi labio nerviosa y pienso en abrirle, no puedo dejar que el piense eso, puede que lo dije en juego pero el si es mi amor.

-Kaylen - llamo y le quitó seguro a la puerta.

Al abrirla tan solo un instante y lo tengo acorralado contra la pared y su cuerpo.

-¿Estas fingiendo? - pregunto molesta y él sonríe.

-Tu me mentiste primero - asegura frunciendo sus labios.

-No te mentí, eres un tonto, pensé que te había hecho sentir mal, yo - pero lo empujo mirándolo mal.

-Sal de mi habitación - gruño y él solo me mira.

-¿Que no escuchas?- pregunto molesta y él me besa.

Me besa, nos estamos besando, debería detenerlo pero no quiero.

-Anda vete - digo al separarme de sus labios y él mantiene su mano en mi mejilla mientras sus ojos azulados me miran fijamente.

-Está bien, saldré del baño - dice y asiento.

Después de que por fin saliera Kaylen de mi habitación puedo respirar mejor y sonrio como una tonta,¡Me besó!