Gabriel se mostró atento con Elena durante todo el viaje, procuró su comodidad en todo momento. Para ese vuelo había dispuesto de un avión privado que los llevaría a la isla de tórtola. Después del aterrizaje en el Tórtola Beef AIsland aeroport, cogieron una embarcación hasta el Scrub Aislan Resort Spa and Marina donde pasarían las próximas tres semanas que duraría la luna de miel en las que decidirían su futuro. El hotel era un lugar paradisíaco, rodeado de aguas cristalinas y de paisajes de ensueños, en la habitación encontraron arreglos de flores exóticas, frutas y una botella de champán. Elena no pudo evitar mirar a su alrededor con admiración, el lugar transmitía la paz que ella tanto necesitaba y agradeció en silencio estar allí. Las paredes eran completamente blancas, los mueble

