No quería decirle nada a Leo sobre lo sucedido, pero al parecer al señor Antonio se le fue de más la lengua y ahora me veía obligada a contar todo. —Anda, responde mi pregunta. Le conté todo lo sucedido, incluyendo mi encuentro con Sebastián y lo que el abogado me había dicho acerca de trabajar. Leo miró a su mamá con un evidente enfado y pude ver que trató de contenerse un poco. —Mamá, no puedo creer que te atrevieras a hacerle eso a Zoé. La única que se ha portado pésima aquí, has sido tú y nadie más que tú. Lo mejor es que te vayas y vengas solo los fines de semana que es cuando me encuentro aquí, no pienso permitir que sigas maltratando a la mejor amiga de mi difunta mujer. —¿Por qué no pensaste en eso cuando te acostaste con ella? Que es la mejor amiga de tu difunta mujer, solo pe

