Gloria había pasado por todas las casas del vecindario pero nada había salido con éxito, todo estaba demasiado extraño y nadie quiere abrir las puertas no sé que cuando haya llegado a sentir el aire demasiado pesado como si hubiese algo dentro que estuviese aficciando a las personas pero ella estaba perfectamente bien fuera de aquella casa. Se sentía justo como la casa de Miguel y Ángela, era ese tipo de sitio en el que para alguna extraña razón todo se sentía un poco pesado y era por la abundante energía maligna que se encontraba en aquel lugar. Gloria lo sabía perfectamente y es por eso que prefería 1000 veces no acercarse demasiado al momento de tocar el timbre y que nadie le abriera. "Es preferible que no me abran aquí me asesinen" decía ella en su mente sin pensar demasiado lo que est