AMÉRICA
Si antes pensaba que las cosas estaban mal, ahora creo que se han vuelto mucho peores; esa es la realidad. Mientras voy a la cocina y abro la nevera en busca de una bolsa de guisantes congelados, la cabeza me da vueltas. Bryce ha estado bebiendo, y su amigo Rupert intenta que entre en razón. Sus voces se amortiguan desde la estancia principal.
Saco mi móvil nuevamente e intento contactarme con mi padre o incluso con Alene, aunque no debería, considerando lo perra que se ha vuelto. No obtengo respuesta. Suelto un largo suspiro y me preparo para enfrentar a mi némesis.
Cuando entro a la estancia principal, Bryce sigue diciendo incoherencias mientras su amigo intenta que se calme. Sus ojos verdes me fulminan y mi valentía se evapora. Su mirada es tan oscura que incluso yo le temo e
