Solo porque sí

5 Una chica diferente

Una chica diferente

Cuando uno hace un trabajo como el mío es bastante común encontrarse con personas desagradables, mujeres que no comprenden lo que es el amor más allá de los eventos públicos y los lujos que pueda darles, por eso. Después de aprender eso decidí que lo mejor que podía hacer era llevar una vida austera y dejas que se acercara a mí, única y exclusivamente la persona que me quisiera por quien soy, ella no me quiere a mí. Pero es tan pura su forma de querer al imbécil que es justo como las mujeres que evito, que la quiero ayudar ¿colaboraciones? Eso no es algo que me guasta hacer, pero así me puedo mantener cerca de ella.

– Me parece que justo aquí puedo poner mis cosas – le estoy diciendo a ella cuando siento abrirse la puerta

– ¿Cómo es eso de que están haciendo una colaboración? – nos pregunta Marck

– Si – le respondo yo, porque ella más allá de que esta roja como el demonio, no puede hacer nada más, es como si se anulara cuando lo ve – decidimos hacer una exposición en conjunto – al menos entre yo y ella nadie va a guindarse del éxito del otro, ella es una alfarera de gran renombre, y yo, a pesar de estar utilizando un nombre diferente, no puedo decir que me vaya mal

– Creí que harías una exposición en mi galería – le dice Marck

– No es como que después de esta exposición me vaya a morir – le responde ella sin mirarlo

– Si quieres nos puedes prestar tu galería y así nos ahorramos el dinero – resopla

– La idea es que exponga conmigo – a eso llamo colgarse del éxito de alguien mas

– Me parece que entre las cosas que debes de aprender, es a hacerte un nombre propio antes de que pidas este tipo de cosas – si quiere que le enseñe, me lo voy a tomar en serio y le voy a enseñar, además, un poco de valores - ¿puedes ir moviendo las cosas de aquí a otro lugar? – me aseguro de que no son cosas pesadas antes de hacerle la petición, Joi asiente – tu sígueme – de camino aquí vi un bar muy bueno y adecuado para mostrarle algunas cosas, camino hasta el lugar y el me sigue en silencio

– ¿para qué querías traerme aquí? – me pregunta cuando ya estamos dentro y sentados

– Bebe conmigo – le pido – así podremos hablar con más tranquilidad – se sienta frente a mi

– Yo no bebo, pero tú puedes beber todo lo que quieras – es raro de principio a fin

– De acuerdo – me pido un trago y doy un sorbo antes de comenzar a hablar – en primer lugar, tienes que mejorar tu técnica, en este momento es un total desastre, imagino que tus deseos son inmensos, pero te falta bastante, por lo que considero que tener un estudio como el que tienes es un total desperdicio – se ríe

– ¿eso lo dices porque el tuyo no es ni la mitad? – no sé cómo lo hace, pero por momento es más desesperante

– Tienes razón, el lugar en el que trabajo no es ni la mitad del estudio que tienes, yo ni siquiera tengo un lugar para exponer mi trabajo, tampoco Yoi

– ¿Por qué dices su nombre de esa forma tan patética? – sonrío

– Me gusta como suena cuando lo digo, es como estar llamando a la alegría

– ¿te gusta ella? – lo pienso

– Aún no he decidido si me gusta o no, de momento quiero estar cerca y ayudarla – le respondo – lo que no comprendo es porque me preguntas cuando no tiene por qué importarte

– ¿acaso sabes que ella está enamorada por completo de mí? – me tomo el resto de la bebida para no perder la calma

– ¿lo sabes y aun así lo dices con tanta naturalidad? – lo digo a modo de reproche

– ¿y como esperas que lo diga? – sonríe – no puedo estar con ella solo porque ella este enamorada de mí, no es tan buena como piensas, me hizo daño, ahora no puedo volver atrás – se levanta – voy a aceptar tu ayuda ya que ella te lo pidió tan amablemente, te espero mañana en mi estudio – se va dejándome solo, necesito regresar y preguntarle a ella que es lo que se supone que le hizo para que me diga que ella no es tan buena, no es que me interesa el pasado de ellos dos, pero me da curiosidad conocer los tontos motivos de este hombre, cuando entro en su estudio ella está intentando mover la mesa de trabajo

– ¿Por qué mueves eso? – le pregunto, cuando le pedí que moviera las cosas eso no estaba en mis planes

– Es que estuve pensando, y estaría bien si pusiéramos tu caballete frente a mi mesa de trabajo y así veo lo que haces y tú también puedes verme

– ¿tanto te gusto que quieras estarme viendo a cada momento? – suspira

– ¿Qué hiciste con Marck? – ella sabe que no me agrada

– Tenía ganas de asesinarlo, pero de momento solo se fue después de ordenarme que mañana vaya a su estudio – lo pienso una vez más antes de preguntarle - ¿puedo preguntarte algo?

– Dispara – se sienta y me mira

– ¿Por qué él dice que tú le hiciste daño? – baja la cabeza

– Es justo lo que hice, y aunque lo intenté arreglar después, ya no había marcha atrás, mucho menos ahora

– ¿me puedes contar? – asiente

– Claro, ya te conté cosas peores – recuerdo lo que me conto y lo difícil que fue para mí no imaginarla sin nada de ropa – cuando ya teníamos como dos años de relación estuve embarazada, perdí al bebe antes de tomar una decisión de que era lo que quería hacer con él, después de eso me quede con algunas molestias y fui al médico con mi amiga, me dijeron que mi útero tenía algunos problemas y que mientras más me demorara en tener un bebe, más difícil iba a ser – comienza a llorar

– Detente – le pido – no es tan importante que me cuentes como para que llores, estoy bien sin saber

– No estoy llorando por contarte, es que recordar esos momentos es difícil para mí – me confiesa

– Entonces olvídalo – niega

– Termina de escuchar – asiento – cuando me dieron esa noticia decidí que era el momento de tener un hijo, pero tenerlo con él era difícil, pensaba que aún era un adolescente y no estaba preparado para ese tipo de responsabilidad, así que escogí a alguien más y deje a Marck, comencé con el padre de Luca, pero aun así lo veía, él me decía que estaba triste, que me extrañaba y caímos en una relación del tipo en el que una mujer no debe de enredarse, teníamos sexo cada vez que teníamos la oportunidad, cuando le dije la verdad de por qué me había separado de él, pensó que la mejor solución era que tuviera al bebe con él y dejara que alguien más lo criara, mi solución era volver a confiar en él y que se hiciera cargo de lo que decía sentir por mí, pero eso nunca sucedió, muy por el contrario me comenzó a tratar como una puta, me denigraba y ofendía en cada oportunidad que tenía – se calla

– ¿entonces por qué dice que tú le hiciste daño? – le pregunto porque hasta ahora no lo comprendo

– Les dice a todos que estaba enamorado de mí y que le hice mucho daño cuando lo deje por el padre de Luca – se ríe – no sé cómo él ve las cosas, le di la oportunidad de arreglar el asunto, le conté la verdad y el prefirió alejarse de mí y hacer su vida de una forma más tranquila

– Es bastante extraño, da la impresión de que no ve a nadie más que a el mismo – asiente

– Así es – me da la razón – pero dejemos ese tema, tenemos trabajo que hacer – me rio

– Apártate, voy a utilizar mi fuerza de hombre para mover esa mesa de lugar – pongo la mesa donde ella la quiere - ¿algo más que quieras mover? – me señala algunas cosas

– A mí me gusta tu estudio, podíamos haber trabajado allí y solo traer las cosas al horno una vez que estuvieran listas – niego

– Quiero estar en tu espacio, es la mejor forma de conocerte

– No quieras conocerme con tanta fuerza – me dice – no tengo nada especial que compartir – no creo que sea así, ella es lo suficientemente especial como para que quiera hacer muchas cosas con ella, como para que sepa todo de ella, sigo sin entender que es lo que está haciendo este imbécil la utiliza de esa forma, y por qué ella lo permite

– Eso déjame a mí que lo decida, no eres quien para saber o decidir lo que yo necesito o no saber de ti – me acerco a ella – ni siquiera yo estoy seguro de que es lo que necesito – me está mirando seria - ¿Qué?

– Estás loco – se ríe – no sé qué es lo que quieres saber, pero ya me subí en el bote y te dije que te contaría todo de mí, así que puedes saber lo que desees – y lo hare, aprenderé tanto de ella como me sea posible en el tiempo que me permita estar a su lado.