El regreso a Detroit fue silencioso. Maxine continuaba pensando en las palabras de Lars, en su propuesta y en la idea de volver a confiar en él, o, por lo menos, en la de tomarlo como aliado, aunque no confiara para nada en él. Aunque Lars ya le había dicho a Rosamund que sabía lo de la muerte de Gavin, prácticamente no podía hacer nada por la situación en la que estaba, esa ya era una ventaja... O al menos eso suponía. Sin embargo, estaba la situación con Gabriel. Hasta ahora conocía muy poco sobre él y no tenía ni la más mínima idea de lo que él podía llegar a hacer, pues siempre había actuado como el tío cariñoso y amoroso con ella. Se preguntaba: ¿qué otros secretos escondía su tío? ¿Qué podía esperar de él? ¿Iría a confrontarlo de una buena vez o actuaría igual a como había estado

