Gloria se bajó de la camioneta y se sentó en un descuido al lado del pasajero del auto sin ser invitada. — Señora no creo que tenga edad para un secuestro.— bromeaba Manuel al ver a su escolta cercarlos. — No es posible... usted.....usted .—lo señalaba incrédula. — ¡¡Yo que!!. Mire señora soy un hombre ocupado,¿que pretende??.. Los tienen rodeados.— le señalaba. — Conoce a una enfermera con el apellido Villar.— preguntaba nerviosa de la locura de los dos hace algunos instantes. — Le contesto si me dice quien es usted.— dos personas mayores ,casi de su edad,el colmo de los colmos,pensaba. — Soy la tía de Malena, la amiga embarazada de su hijo. ¿Conoce o no a una enfermera de apellido Villar?.— Le mostraba fotos del cumpleaños de Santiago en su teléfono donde estaban todos los em

