En todos esos años sola ,jamás se había imaginado que volvería a su primer amor. Ahí lo tenía en su cama y seguía siendo solo suyo. Se hacia pequeña con el allí,pero que importaba, su intención era dormir encima o debajo de el. —¡¡Pervertida!!.— se reclamaba a si mismo mordiéndose el labio. Le sabía a poco y eso que lo habían hecho dos veces. Mejor era dejarlo descansar si pretendía seguir usándolo. Al llegar a la sala la empleada le preguntaba que quería almorzar. — Se que no es día ,pero quiero ñoquis,esos que haces con bonito ,anda dale...— volvía a ser una niña cuando quería algo de ella. La conocía de siempre . Habían tenido que dispensarla cuando la situación económica estaba jodida y apenas le podían pagar por su trabajo. Pero en cuanto eso mejoro , enseguida la buscaron

