Gertrudis
En cuanto llegamos al hospital el doctor nos estaba esperando con un grupo de otros médicos y enfermeras, tal como prometió, nos atendieron muy rápido, mi padrino se encargó de todo el papeleo, mientras mis papás y yo esperamos en una sala aparte, a ninguno de nosotros nos permitieron acompañar a Caro.
- han dicho algo? - pregunta mi padrino, sentándose a mi lado, yo digo que no, moviendo mi cabeza - entonces esperemos - dice tomando mi mano, mientras ambos permanecemos con la vista al frente y sin decir nada. Al cabo de unas horas, un hombre mayor y con una bata blanca se acerca a nosotros imagino que es otro de los médicos que atiende a Carolina, pero no es el mismo que nos recibió en la entrada el otro era joven.
- padre Sergio - saluda primero a mi padrino - lamento que no
