— No lo he pensado realmente.
—Ese es el problema, Melania, no piensas nada malo de él, aparte de eso ¿qué harás con el chico que si movió tus emociones? Sabes perfectamente de quien hablo, Pie…
—Detente, no quiero recordar su nombre.
—¿Porque? ¿Qué daño te haría?
—No me interesa, no quiero saber nada de él, además, solo fue una ocasión en la que nos vimos, de seguro ni siquiera me recuerda.
—Para empezar, no lo sabes y en segunda ¿me negaras que lo olvidaste? Que no lo has recordado ni siquiera un instante.
Para evitar responder desvié la mirada y guarde silencio, sabía que aunque no comprendiera la razón el nombre de Pierre Dubois aún estaba grabado en mi memoria, al igual que su persona en general.
—Dejando ese tema a un lado te diré que está situación no me agrada.
