MERSIN, TURQUIA.
Habia estado tan ocupado preocupándose de los temas del trabajo, que olvidó por completo aquel papel que podía cambiar su percepción de las cosas. Por primera vez, al verla allí, con las manos cruzadas sobre su pecho y reflexiva, se debatió en la posibilidad de pasar su vida atado a Elif como se suponía que debía ser el matrimonio. Nunca fue un hombre que permaneciera en un solo lugar o que pensara románticamente sobre la vida a lado de una sola persona, pero con ese sobre en la mesa, ese escenario se abría peligrosamente.
No conocía como era una familia, porque jamás habia tenido una tradicional.
—¿Lo has leído?
Asintió. Su rostro era complejo de leer. Sus gestos parecían estar centrados en no dejar ver las emociones que cruzaban por su psique y sus ojos estaban ca
