Mi nueva versión

Sipnosis

Existen momentos a lo largo de nuestra vida donde debemos ponernos a prueba a nosotros mismo, a nuestro carácter, nuestra entereza, la voluntad que poseemos, la responsabilidad con nosotros mismos, con nuestros sentimientos y nuestras emociones, donde debemos ser egoístas y apostar siempre por nosotros y por nuestros amor propio sin importar lo que puedan pensar los demás; Siempre vamos a tener situaciones desafiantes, obstáculos que nos harán caer y retroceder para que saquemos fuerza de donde sea para continuar hacia adelante.

Muchas veces en esos momentos llenos de dificultad e incertidumbre nos apoyamos de una persona que amamos, puede ser pareja, amigos o bien personas de nuestro círculo familiar, confiamos en que ellos jamás nos lastimaran, al menos no de manera directa, no con alevosía, por esa razón no solo se convierten en el apoyo que necesitamos sino que le damos toda nuestra confianza sin titubear, sin medir la magnitud de semejante acto, confiamos tanto en ellos que le contamos secretos, traumas e inseguridades, nos olvidamos que también son seres humanos, que cometen errores, que se equivocan, que tienen un lado egoísta y de supervivencia.

Cuando ese lado negativo sale a la luz es que somos conscientes del gran error que cometimos al entregar nuestra absoluta confianza sin más, sin siquiera poner a prueba la lealtad de esas personas hacia nosotros, entonces es cuando nos fallan y nos lastiman, donde nos vuelven miserables quitándonos las ganas de continuar, aniquilando la esperanza de volver a confiar.

Justo eso sucedió en mi vida, confíe en la persona menos indicada porque según me amaba y daba la vida por mí... Corrección no dio su vida por mí, me quito la mía, la convirtió en un basurero, literalmente le entregue todo confiando que recibiría balas por mí y jamás conté con que fuera el quién me dispararía a sangre fría; Sin embargo, todo se paga en el camino de la vida y realmente somos mucho más fuertes de lo que siquiera imaginamos y aquí estoy haciendo el intento de ser fuerte.

Nunca es tarde para iniciar de nuevo, al menos eso fue lo que dijo mi psicóloga después de meses de terapia, pero ella omitió un detalle y es lo agotador que se vuelve levantarte e iniciar cuando ya no confías ni en ti misma, cuando tienes el miedo latente de que sucederá lo mismo del pasado, cuando estás rota y llena de inseguridades que te han marcado por culpa de personas sin escrúpulos, qué difícil es iniciar de nuevo cuando no tienes ni idea de quien eres, cuando estás totalmente perdida, cuando el miedo te paraliza.

Qué compleja se vuelve la vida cuando estás tan exhausta de ser herida, cuando ya no sabes si realmente vives o es tu espíritu que aún no se ha marchado del plano terrestre, qué incertidumbre cuando no conoces el camino, cuando no recuerdas como volver a vivir o a sonreír, que penoso es cuando ya las palabras de aliento y motivación no cumplen su cometido.

Por qué siendo realistas quién en su sano juicio estaría con una persona como yo por voluntad propia, la respuesta es muy simple... Nadie quiere en su vida a un ser que tenga que unirle los fragmentos rotos, que ser humano querría a alguien tan quebrada física y emocionalmente; por más que quieran hacerme entender lo contrario sé que no es así, la vida se encargo de demostrármelo personalmente, de hacerme vivir en carne propia que las personas marcadas no son merecedoras de dichas y alegrías.

Me he convertido en sombras, en lejanía y frialdad, mi corazón se marchito, mi alma está negra sin esperanzas, pero aún camino, la vida se empeña en hacerme continuar así sea arrastrándome...

Así mismo como la vida te enseña la peor cara de moneda, te hace tocar fondo hasta dejarte sin nada, de esa misma manera se encarga de hacerte tragar cada una de tus palabras, hace que te retractes de transformarte en tu peor versión; en ningún momento imagine que llegaría el día donde tendría que agarrar cada una de mis quejas, cada una de mis palabras, cada actitud llena de crueldad y ponerla en la canasta de basura para dejar todo atrás cuando has aprendido lo necesario...