Antonio aún descansando encima de ella asintió, y luego puso sus codos sobre la cama, y con una de sus manos tomó su rostro de la mandíbula y comenzó a besarla sutilmente. Después, Antonio se separó de ella y comenzó a descansar mirando hacia el techo, al separarse, su pene aún continuaba un poco erecto y Laura lo miró que estaba lleno de todos sus jugos post sexo. —El mundano esta sucio—comentó ella con voz juguetona— ¿se lo limpio con mi boca doctor? —No, déjalo para más tarde, ahora está sensible. Minutos después… Envueltos en batas de baño después de aquella sesión de intimidad intensa, la pareja compartía unas hamburguesas de McDonald's en la cama que habían pedido hace un rato. Antonio, quien llevaba años sin probar comida chatarra, no pudo evitar reconocer que esa hamburguesa re

