Punto de vista Antonio Laura ejerce sobre mí un efecto abrumador. Fue como si se abrieran los cielos cuando me pidió que no me fuera y me preguntó si ella sería mi primera mujer. No dudé en responder afirmativamente, y creo que… tal vez sería la única, porque estoy perdidamente enamorado de ella como nadie tiene idea. A pesar de mis nervios por esta confesión, temí que la intensa erección que tenía, gracias a sus besos al entrar en la habitación y al desnudarnos, desapareciera rápidamente. Sin embargo, todo cambió cuando Laura tomó mi dedo y lo chupó de manera seductora, quitando mi anillo de castidad. Mi boca se abrió y mi corazón pareció querer escapar de mi pecho. Era la primera vez que experimentaba esta ardiente sensación como si unas brasas ardieran dentro de mí. En un abrir y cerr

