CAPÍTULO CUATRO.
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UN POCO MÁS.
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ฅ^•ﻌ•^ฅ?ฅ^•ﻌ•^ฅ Narra Neferet ฅ^•ﻌ•^ฅ?ฅ^•ﻌ•^ฅ
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Cuando salgo de la casa me adentro rápido en el bosque para no ser vista por ningún chismoso, me quito rápido el vestido verde y me transformo en lobo para poder correr más rápido y rastrear el aroma del vampiro; Siento algunos viejos rastros una vez que avanzo por el bosque pero no es ninguno de ellos en realidad, y estoy casi segura de sentir un aroma levemente diferente así que avanzo por un rato olfateando en el suelo hasta que lo veo bajo la luz del sol refrescándose en el río.
Regreso a mi forma humana y me acerco a él que al notar mi presencia se sorprende pues voy de prisa.
— ¡Mi padre! — Le digo abrazándole con fuerza y comienzo a llorar. — Él no entiende que todos nos equivocamos — Y en respuesta a mi lamento, el vampiro me abraza y me consuela; Sé que entiende muy bien de lo que hablo.
— Todo es mi culpa, yo cometí el error y ahora estoy pagando caro, pero no puedo verte sufrir a ti de esta forma, iré con él y aceptaré todo el castigo — Pero no puedo dejar que mi padre lo vea, no en esta situación; La simple idea de que lo hieran me rompe el corazón.
— ¡No! Él está cegado y si vas te hará daño lo sé — Le digo aferrándome a su cuerpo caliente por el sol.
— Entonces pensaré en otra cosa, pero no llores más de acuerdo lo solucionaré, lo prometo — Cuando lo dice y lo miro, veo en su rostro tanta preocupación, pero aun así me sonríe, me acaricia la mejilla y me siento muy bien a su lado. — Vete a casa y no llores más — Me dice después de un rato, estuvimos sentados bajo un árbol platicando de cosas pequeñas. Lo abrazo una vez más y respiro su aroma muy profundo para no olvidarlo, huele a tierra húmeda; Debe llevar mucho tiempo escondiendo su aroma, es muy difícil de encontrar así pues casi todo el bosque huele a eso. Nadie podría encontrarlo ni siquiera yo, y con ese pensamiento mi corazón se rompe, al creer que se oculta hasta de mí; Quizá soy un peligro y por eso no me quiere cerca, pues ya hoy me ha costado mucho encontrarlo.
— Hueles a tierra mojada igual que todo el bosque, así no podré encontrarte mañana — Le digo agachando la cabeza.
— Lo siento — Me responde dejando salir una sonrisa. — La próxima vez tendré un olor que solo reconocerás tú lo prometo, mmm ... ¡Ya sé! Solo sigue el olor de la menta ¿Sabes cuál es cierto? — Lo pienso por un momento y al fin le respondo.
— ¡Si! Es un aroma muy rico, una señora cerca de mí casa lo siembra en su jardín —.
— Busca ese aroma entonces y me encontrarás — Asiento con la cabeza y una gran sonrisa mientras me doy vuelta para partir, y con pasos lentos me alejo tomando un camino diferente a casa. Regreso mientras pienso en no temerle a mi padre más, voy a enfrentarlo y hacerlo cambiar de opinión no importa lo que cueste, pero ¿Me pregunto qué hará el vampiro para solucionarlo? Ni siquiera le eh preguntado su nombre, lo buscaré después y se lo preguntaré, ahora que ya se cómo buscarlo; Debo seguir un rastro de tierra húmeda con menta, y pensándolo con cuidado... debería oler también a algo único para él ¿Pero que aroma sería ideal?.
— ¡Ya sé! — Se me escapa en voz alta después de pensarlo solo un poco, justo antes de entrar a la casa; Lo que hace solo la atraviese, llegando de prisa a la entrada, para cumplir con mi pequeña misión.
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?•́ ‿ ,•̀?•́ ‿ ,•̀ Narra Ricardo •́ ‿ ,•̀?•́ ‿ ,•̀?
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¡Me eh equivocado! ¡Soy tan tonto! ¡Cómo pude caer en su mentira! Ahora ella está sufriendo, me rompe el corazón verla así y solo puedo hacer una cosa...
Me dirijo hacia el lugar donde ahora están reunidos los vampiros, cerca del final de las tierras del Creador.
Durante estos años los hombres lobo han acorralado a los vampiros hasta este lugar, ellos son fuertes y ágiles; Nosotros al contrario necesitamos tomar la sangre de otros animales para sobrevivir apenas, y nunca alguien me ha explicado el porqué.
Al llegar veo sus casas que parecen poder ser llevadas en el hombro en caso de ser necesario, lo que es asombroso.
Veo a unos pequeños correr frente a mí y eso me hace sonreír, pues después de tantos años estoy en casa otra vez; Pero al seguir avanzando uno de los vampiros jóvenes me mira con odio, si quiero que me ayuden tendré que pelear con ellos al parecer. No tengo otra opción, estoy a punto de recibir la paliza de mi vida, porque nunca he peleado, pero haré lo que sea por ella.
El vampiro se acerca y para mí sorpresa solo me mira pero no me ataca; Y sigo mi camino, donde más vampiros se acercan a mí por todos lados.
— Ya sabemos a qué vienes — Dice un viejo vampiro que se acerca abriéndose paso entre los otros, quedando frente a mí; Canoso y delgado, pero parece ser el mas respetado. — Necesitas ayuda, después de todos estos años no te hemos entregado, pero necesitamos saber ¿Qué fue lo que pasó? — Para cuándo él termina de hablar, muchísimos vampiros me rodean así que comienzo a narrar, y empiezo por el principio para que puedan comprender lo que ha sucedido; Desde la extraña muerte de mis padres, hasta ese día.
— Yo estaba en mi casa, solo, acababa de regresar del entierro cuando oí la voz de una niña pidiéndome ayuda así que fui a buscarla, la encontré caminando hacia el bosque y la seguí para que no se perdiera; No sé cuánto tiempo caminé pero ella era muy bonita y al mirarla me sentía hipnotizado; Te llevaré a un lugar mejor, me dijo; pero al darme cuenta habían pasado años, todo lo que hice durante ese tiempo no puedo recordarlo, solo sé que seguía a la pequeña, cuando reaccioné estaba justo frente a los límites de las tierras, solo vi oscuridad y a la pequeña entrar en ella, quise detenerla para protegerla pero ella ... — Sacudo la cabeza intentando recordar con claridad — Solo metí la mano pero pude sentir que algo se unió a mi aquel día, la niña me dijo que podía pedir un deseo, lo que quisiera mi corazón y en ese momento solo quise encontrar a mí pareja ideal, yo era muy joven, y quería llevar una vida como mis padres, así volví viajando mucho tiempo y al llegar solo mordí a la pequeña, no sé lo que me pasó pero debía hacerlo — Agacho la cabeza pues no puedo explicar lo que sentí aquel día cuando la mordí.
— ¿Cómo que no sabes? — Pregunta alguien.
— Estaba nervioso cuando vi a la pequeña, sentí la necesidad de morderla y eso hice, pero ella se desvaneció y me asusté así que volví a la oscuridad y ahí estaba esa niña, la misma que me llevo la primera vez, me dijo antes de volver esta vez que debo darle de mi sangre a todos los vampiros, solo una gota y que ella estaría conmigo cada vez que la necesite —.
— Ya estamos muy cerca de los límites de las tierras, solo a horas — Dice el anciano.
— ¿Por qué debemos confiar en ti? Eres quien ha causado todo esto — Ahora es cuando puedo convencerlos de estar de mi lado, y el anciano parece dudar del Creador.
— La oscuridad no es mala, no le teman ella nos ayudará — Digo alzando la voz para que todos puedan escucharme.
— ¿Y qué propones que vayamos a ella? — Dice alguien más entre la multitud y no es mala idea en realidad.
— Ella podría ayudarnos y protegernos — Respondo seguro de mis palabras.
— Hay una razón por la que el Creador nos ha alejado de ella, ir sería ir en contra del Creador — Dice alguien más que no logro mirar pero su comentario me molesta.
— ¿¡Y qué hizo él en estos años!? ¿¡Acaso detuvo a los lobos de acorralarnos!? ¡Al parecer se olvidó que también estamos aquí! En cambio la oscuridad me protegió y también puede ayudarlos, creo que ella quiere liberarnos, solo confíen en mí ... y en ella — Los vampiros se miran, algunos convencidos con mis palabras, otros un poco dudosos pero aceptando al final; Y después de pensarlo un poco se dan cuenta que al parecer el Creador los ha olvidado y yo estoy en lo cierto.
— ¿Entonces? ... ¿Qué hay que hacer? — Dice el anciano y no lo pienso ni un momento.
— Deben tomar una gota de mi sangre, así crearemos un vínculo entre nosotros — Estoy feliz de poder obtener su ayuda, pero lo que no eh notado, es que uno de los vampiros después de tomar la sangre desaparece. Es algo complicado esto que estoy sintiendo, sus emociones y sus pensamientos nadan en mi mente dejándome aturdido; Y como es la primera vez, aun me estoy adaptando. Pero por ahora, todos los vampiros nos dirigimos a la oscuridad; Donde ella nos recibe con los brazos abiertos mientras nos da un nuevo hogar en las sombras, lejos del sol y del Creador que al parecer nos ha olvidado.
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ಠ_ಠ?ಠ_ಠ? Vista del Alfa Ale .?ಠ_ಠ?ಠ_ಠ
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— Justo en ese momento nacía el primer Rey vampiro y se creaban los primeros vínculos, pero eso no lo sabían ellos — Mi madre se para deteniendo la historia. — Necesito ir al baño, denme un momento — Nos dice y nosotros nos miramos en silencio por un momento.
— ¿Entonces ellos también descubrieron el vínculo? Es increíble no lo crees amor — Le digo a Adri analizando la historia que no se parece en nada a lo que nos han contado desde que nacimos; Aquellas historias que nos enseñan en la escuela, o en lo que creen los humanos.
— Si me sorprende bastante, pero entonces ... ¿Cómo encaja la Diosa Luna en todo esto? — Adri pregunta y mi madre la escucha y le responde.
— Encaja en todo, aquí va la mejor parte de la historia; Los vampiros ya se encontraban en la oscuridad aceptando a un nuevo Dios, o Diosa, lo que sea la oscuridad y Neferet intentaría convencer a su padre de no asesinar al vampiro que la marcó, pero ambos ya estaban en lados opuestos y el primer Alfa y el primer Rey vampiro habían nacido, y estaban casi listos para ... — Pausa dramática de mi madre.
— ¡¿Para qué?! — No puedo evitar gritar, y tampoco puedo creer que nos deje en suspenso.
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