Estaba nerviosa mientras me dirigía a la oficina de Benjamín. Es demasiado estúpido sentir que hago algo mal, o sentir que lo he traicionado. Después de todo me odia, no me quiere ni ver, no somos nada más que los padres de Vitto y para colmo esta comprometido y será padre nuevamente. Golpeo suavemente con la esperanza de que no escuche y no deba hablar, ya lo sé, muy maduro de mi parte. - PASA – esta molesto, lo siento en su voz. - Seré breve – dije entrando, pero con ganas de salir corriendo cuando vi su cara – quería aclarar porque no deje a Vitto contigo la otra noche. - No hace falta – por dios este hombre me va a matar con la mirada – no hay nada que aclarar. Lo dejaste con tu novio. Por lo que entiendo y he visto no hay mucho que aclarar, otra vez quieres borrarme de un plumaz

