La Ciudad Del Silencio La transición a través del portal no fue instantánea. Selene, Kael, Alina y Asterion sintieron como si una fuerza los desgarrara, llevándolos a través de un espacio suspendido entre dimensiones. Cuando finalmente tocaron tierra, se encontraron en medio de una ciudad en ruinas. El aire era denso, cargado con un aroma metálico que recordaba a sangre vieja. Las edificaciones, una vez majestuosas, ahora estaban cubiertas por una capa de polvo y musgo oscuro que se movía como si tuviera vida propia. —¿Dónde estamos? —preguntó Alina, con su voz apenas un susurro. —En el corazón de lo perdido —respondió una voz, pero no era ninguna de las suyas. Todos giraron, buscando al dueño de esa voz, pero no había nadie. Kael desenvainó su espada, mientras Selene observaba con ca

