4

1023 Words
Pensé en aprovechar que ambos seguían dormidos antes de irme, pero ya que me habían tratado tan bien no podía ser desagradecida, despacio me metí bajo las sabanas hasta llegar e el pene recto de Mat y poco a poco empecé a masturbarlo, después lo metí en mi boca y comencé a chuparlo, sentí unas manos sostenerme de los costados y jalarme fuera de las sabanas.   _Es una buena forma de despertar, pero no es suficiente – dijo Mat con una sonrisa  Sonreí y me puse a horcadas sobre el, me introduje su pene lentamente y empecé a mover lentamente mi cadera, los gemidos se me comenzaban a escapar cuando un peso en la espalda me empujo hacia Mat. -eres bastante egoísta preciosa, yo aun sigo aquí-  Era Iván lo habíamos despertado no sé en qué momento se levantó de la cama, pero tenía un pequeño bote morado en la mano.    *!Es lubricante¡ no me digas que él va a hacer lo que estoy pensando*  abrió el bote y puso un poco del líquido en su mano.   -esta vez te hace sentir mejor que anoche, tu solo relájate y déjate llevar - me susurro Iván en el oído. Comenzó a besarme, Mat seguía moviendo sus caderas mientras ambos me tocaban, estaba muy excitada e Iván introdujo uno de sus dedos en mi trasero, aunque era extraño mientras más lo movía más estimulante era para mí,  sus manos rasando mi piel, el pene de Mat el interior de mi v****a me hacía sentir muy bien, Iván metió otro dedo más y simulaba envestidas con ellos en mi trasero se sentía demasiado bien.                                                                                                                                                                Mat chupaba suavemente uno de mis pechos; dio una ligera mordida en este que causo que un extraño escalofrío recorriera todo mi cuerpo, Iván paro todos sus movimientos y se colocó atrás de mi, poco a poco iba metiendo su pene en mi trasero era doloroso; me hacía gemir y quejarme, no se detuvo hasta que entro completamente, fue la mejor sensación que había sentido; comenzó a dar embestida y el placer recorría todo mi ser nuestros cuerpos se fundían con movimientos, gemidos y estábamos rebosantes de placer los fluidos corporales de fundían entre si, las caricias, los besos y palabras eróticas que surgían por el calor del momento, hacían que mi cuerpo hirviera de placer se sentía también era doloroso pero el mismo dolor se sentía muy bien; gemíamos y no movíamos a un solo ritmo, mi piel se erizaba los besos de Mat y las mordidas que dejaba Iván en mi espalda me harían que llegara a el clímax rápidamente ambos siguieron con embestida más fuertes, llego el momento indicado mis gemidos se volvía cada vez más fuertes fue cuestión de segundos para que me hicieran explotar de placer, mi cuerpo se enderezó y todos terminamos juntos, fue como si estuviésemos en perfecta sincronía sus p***s palpitando dentro de mi erizan mi piel y me causaban espasmos estaba sin aliento nos quedamos recostados en la cama.  Poco a poco nos recuperamos, me duche y ellos igual había llegado el momento de despedirnos ellos querían continuar *me hubiese encantado pero mi cuerpo no daba para mas* llegue a casa después de todo, estaba agotada dormí toda la tarde mi cuerpo aun dolía, pero deseaba que fuese viernes por la noche, para disfrutar de nuevo esa experiencia; de tan solo recordar los gemidos y todo lo que sentí, corre nuevamente humedad por mis piernas estaba feliz.                                                        Adolorida y hambrienta hice algo ligero y me fui ala cama a seguir durmiendo, llego el domingo y como no tenia planes para salir decidí ver películas y estar en casa hasta mañana para ir a a trabajar *como toda una doctora*  el día estuvo muy tranquilo comí, dormí, volví a comer, vi televisión, y dormí nuevamente no era diferente a un oso que invernaba. Mi primer día de trabajo había llegado como, no tengo auto tome el transporte publico un autobús, (camión o pesero) como se le llama en México, bueno una de las ventajas de ser mexicano  es que casi siempre llegas tarde a todos lados, pero esta ves tenia que dar una buena impresión ya que es un día importante para mi, me desperté temprano tenia que llegar alas siete en punto, tome un ligero desayuno, me duche ya estaba metiendo las ultimas cosas que usaría en mi bolso de mano y se me ocurrió ver la hora.  –RAYOS VOY A LLEGAR TARDE –  faltaban quince minutos para las siete de la mañana y para llegar a el consultorio eran veinte minutos, sin trafico. –!genial mi primera impresión esta arruinada¡ –salí corriendo de casa, por suerte casi en lo que salí el camión llego; subí y me senté en los asientos de el centro, todo iba bien, yo revisaba la hora en mi teléfono, estaba nerviosa por llegar tarde en mi primer día, deje volar mi imaginación y pensé que después de un tiempo, ya no necesitaría el transporte publico; ya que podría comprarme un auto, así que no llegaría tarde a ningún lugar, luego pensé en ahorrar para tomarme unas vacaciones en una playa de Cancún el sol, agua cristalina, arena, alcohol y sexo, mucho sexo.  – !!ah¡¡ ya me vi -  Un fuerte chillido de llantas me saco de mis pensamientos, estaba ocurriendo un fuerte accidente a unos metros adelante de nosotros, los autos no alcanzaban a frenar completamente y los de atrás los impactaban era una escena muy fuerte, ya que estábamos también ahí el conductor freno de repente, lo que hizo que el camión quedar atravesado en la calle, por suerte nos alcanzamos a detener ya que estábamos en un puente elevado pudimos caer ala carretera de abajo,*es un alivio* eso pensé cuando el chillido de llantas en la parte de atrás nos exalto a todos, había hombres y mujeres que iban a el trabaja y algunos estudiantes, todos estábamos preocupados y asustados, dirige mi vista para ver, que era el auto que quizá se impacte con nosotros.  – demonios !!!!es un maldito tráiler de carga¡¡¡¡¡-
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD