Llegó la fecha de la boda, el día estaba frío y lluvioso, quizás augurio de lo que podría pasar, Sebastián no había visto ni conversado con Anabella durante las últimas dos semanas, sólo había recibido una nota de ella, dónde le decía que iba a casarse con él, en la fecha y hora indicada, no había querido hablar ni siquiera por teléfono, solo había podido tener contacto con sus hijos, incluso se habían quedado un par de veces con él en su apartamento. Estaban muy inquietos, sus continuas preguntan lo preocupaban, porque reflejaban que ellos estaban sufriendo con todo lo que estaba pasando, las constantes eran, "¿Por qué no estás viviendo en casa? ¿Por qué no has ido a visitarnos a la casa? ¿Cuándo regresarás?" Él les respondía que se debía a los preparativos de la boda, no le gustaba ment

