Camino de un lado a otro, y es la quinta vez que me suelto y me sujeto la corbata, porque me hace sentir que por ratos me deja sin aliento debido a los nervios que me traicionan.
Carraspeo
mi garganta y trato de relajarme expulsando todo el aire de mis pulmones.
Paso
mi mano por mi cabeza y dudo que absolutamente todo esto, sea real.
«Es
como un sueño.»
—Señor
Browm, es hora. —me avisa una señorita.
Entonces
velozmente me visualizo a detalle frente al espejo y verifico que mi terno
negro muy bien proporcionado en mi cuerpo reluzca perfecto. Acomodo la pequeña
rosa roja en el bolsillo de mi pecho y con mis nervios en crecimiento, me
apresuro en dirección hacia el salón de la recepción, donde todos nos esperan
anhelando nuestra pronta aparición.
***
La
multitud nota cuando hago mi ingreso tan sofisticado al enorme salón y camino
muy emocionado saludando a todos con mi amigable gesto. Entonces posicionándome
en frente del altar a piernas ligeramente abiertas y con mis manos juntas hacia
adelante, me mantengo en la expectativa de su aparición.
Mis
hermanos se hacen relucir detrás de mí, muy galantes como siempre con sus esplendorosos
ternos completamente blancos, atrayendo las miradas contempladoras de las
féminas del lugar, y se posicionan al lado mío.
Les
sonrío y de pronto comienza a sonar la melodiosa música, tocada por el
reconocido violinista que invité para la entrada de mi bella novia.
Mi
corazón comienza a bombear como loco y todos no giramos a verla...
Ella
se encuentra ahí, tan hermosa y reluciente, con ese largo y magnífico vestido
blanco que le hace ver cómo un propio Ángel.
«Ella
es mi futura esposa» me conmociono con locura.
Claris
camina a paso lento entrelazada a su padre, hasta llegar a mí y es cuando mi
suegro transparentemente extasiado en felicidad, me la entrega de por vida en
mis propias manos.
Mirándola
a los ojos, le guiño un ojo para hacer que se relaje y ella me sonríe
emocionada con sus claras lágrimas en el rostro, por lo tanto, nos giramos al
mismo tiempo para observar al cura y con nuestros sentimientos tan sensibles y
a flote de piel, nos preparamos para decirnos el "SÍ" más importante
de nuestras vidas.
Hoy me caso y soy el Browm, más afortunado del mundo.
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¿Con quién de los cuatro será que se case nuestra Claris? ❤️
(Carita de monito)