Tardamos unos minutos en llegar al hospital, en el camino le envíe un mensaje a Alex, no era lo más conveniente, pero ahora mismo sentía un nudo en la garganta que no permitía hacer nada, la última vez que vi a mamá habíamos terminado peleando, apenas si cruzamos unas palabras el día de mi cumpleaños y ahora le había pasado algo y estaba en el hospital, tenía mucho miedo de que estuviera grave y no pudiera verla otra vez, miles de escenarios pasaron por mi cabeza, desde el más simple hasta el más grave. –Todo va a salir bien. Annelisse deslizó sus manos separando las mías y tomó una dándole un apretón, siempre admiré su entusiasmo y positivismo, mamá me había enseñado a ser realista y no esperar demasiado de la vida. Cuando llegamos distingui a Ro a lo lejos y me apresuré a llegar co

