Capítulo 33: Fugitivos

1291 Words

Juro por mi santa madre que este nunca fue mi plan al venir a Bonaire. Vine a encontrarme a mí mismo, no a matarme en medio de una película de mafiosos italianos. Pero en ella estaba atrapado y embarrado hasta el fondo. Emilia conduce como poseída a toda marcha con las dos camionetas siguiéndonos. Todavía le saca la suficiente ventaja como para que no sepa quién está dentro de esos vehículos, aunque de estar seguro de algo, era que si me atrapaban me darían otra paliza más. Estaba cansado de las palizas. Sin embargo, Emilia es tan brusca manejando que no sabía si una paliza hubiese sido más sana para mi columna vertebral que un choque inminente en algunos minutos. Es algo que compruebo al girar en una esquina con tanta intensidad que me golpeo la cabeza con la ventana de mi lado. —

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD