-Un nuevo día llegó, fue una batalla campal pedirle que se quedara por hoy en casa, ayer tuvo ese ataque y ya deseaba ir a la oficina-
-Le prometí volver al medio día, así que terminó aceptando.-
-Me vestí para salir, hoy decidí ponerme un pantalón blanco tiro alto, mi blusa era azul como el cielo.-
-Me recogí el cabello, unos accesorios pequeños.-
-Lenox me abrazó por la espalda.-
-Estás muy hermosa, no quiero que salgas-
-Exageras-
-Mira tu trasero se ve redondo y firme-
-Lenox pasaba su mano dándome suaves masajes.-
-Se me hará tarde-
-Quédate conmigo-
-Debo ir atender unos asuntos, volveré rápido lo juro.-
-Por favor vuelve pronto- sentía como besaba mi cuello, juro que yo estaba ya mojada.-
-Lenox detente- le decía entre susurros.-
-El no quería escucharme, seguía besá
