La mañana siguiente, tras el desayuno, se vio tentada por llamar a Simone, pero decidió esperar que ella la contactara. En ese momento, la llamada esperada cayó. Las jóvenes quedaron de verse en un centro comercial. Al estar juntas y entrar en confianza, Antonella decidió revelarle la verdad. ―Deseo adquirir más joyas que sean verdaderas. ―Yo puedo ayudarle con eso. ―Michel eres genial. ―Muchas gracias, Simone, pero le confiaré un secreto, en realidad me llamo Antonella. Necesitaba alejarme un poco de una persona y decidí tomarme unas vacaciones. Por esa razón, usé ese nombre, de esa forma no me hostigan. ―En serio, eres igual que mi, te aseguro que a veces quiero abandonar el control de mi padre. ―La vida es un tanto difícil, somos jóvenes y queremos ver a través de nuestros medios

