LXVIII Capítulo 68: Momentos rotos cuando antes eran felices. TIM COLTON Mis ojos percibieron todo como en cámara lenta, me quedé sin respiración, sin alma, sin mente, o al menos con lo poco que me quedaba de cordura cuando vi a Venus caer al suelo y luego a mi padre ser baleado caer inerte al piso. Muertos. El ardor picó en mis ojos y en mis manos cuando grité preso de la ira y agarré el arma que me habían dado apuntando y disparando sin piedad al igual que el resto del equipo, las lágrimas nublaban mi visión, mi pecho ardía sin poder procesar completamente que ellos estaban bien y que cuando solo estaban a unos pocos pasos de nosotros acabaron con sus vidas. No lo creía, no lo aceptaba. Solo tenía un intenso dolor aferrado a mi pecho e ira. Di varios pasos hacia adelante s

