Capítulo 25: Medias verdades expuestas. TIM COLTON Por fin habíamos terminado la visita a la empresa, cuatro días sin ver a mi tortura, la nena de ojos azules que me tenía mal, estar separado de ella estos días solo me hacía recordara cada instante lo que hacíamos cada noche, su cuerpo era mi adicción; sus gemidos mi música, todo de ella me volvía loco, incluso actuar con indiferencia disimulando antes de las personas la atracción que existía entre ambos, era una completa tortura. Yo no servía para mantenerme quieto cuando deseaba algo, y actuar alrededor de ella como si no la quisiera follar en cada puto rincón definitivamente me hacía hervir la sangre. En mis malditos pensamientos solo estaba ella. ─Solo un día más ─susurré para mí mismo, estaba en mi habitación mirando hacia el te

