A veces me pregunto si Maxwell tiene un interruptor para encender su cerebro, y si se le olvidó dónde está. — Hay algo que se llama becas, ¿En serio piensas que solo las personas ricas pueden estudiar y prepararse profesionalmente para ser alguien en la vida? Te juro que si tu inteligencia fuera dinero, estaríamos buscando monedas perdidas en el sofá. La cafetera sonó y fui a servir dos tazas de café, le extendí a Maxwell una de ellas y nos sentamos en la barra del bar. — ¿Me puedes ayudar con algo? — él me miró como un cachorro a medio morir — quisiera poder volver a conquistar a Penélope, realmente la necesito en mi vida y me hace demasiada falta. — ¿Hablas en serio? — moví mi cabeza de un lado al otro — sinceramente de todas las cosas en las que te puedo ayudar, me pides la única qu

